Kickstarter
Un sutil pensamiento erróneo puede dar lugar a una indagación fructífera que revela verdades de gran valor.
Con lo arcanepunk hemos topado.
El proyecto creado en Kickstarter por Revolution, con el fin de sacar adelante un nuevo Broken Sword (el 5º, y con el sobrenombre de Serpent's Curse), consiguió ayer los $400.000 necesarios para dar luz verde a la propuesta. Evidentemente continúan con la financiación abierta e irán añadiendo más cosas cuanta más pasta recauden, ya sabéis, más localizaciones, conversiones a distintas plataformas, escenarios más elaborados...etc. Sin embargo, y ahora viene el MEGATÓN, si llegan al $1.000.000 se pondrán a realizar una continuación de Beneath a Steel Sky. Ahora es cuando los que estamos cerca (o sobrepasando) la treintena danzamos como brujas en celo en medio de un aquelarre.
Parece evidente que el mayor problema de Kickstater es su propia condición de absoluta dependencia del usuario/mecenas y de la visión de éste a la hora de valorar un proyecto. No se como será la cosa entre los que se dedican a financiar novelas y obras de arte pero estoy seguro de que ninguno se deja llevar tanto por la nostalgia/hype como el aficionado a los videojuegos. Algunos de nosotros corremos a desembolsar lo que nos pidan cuando el que lo hace es Tim Schaffer o Brian Fargo, pero al mismo tiempo corremos el riesgo de dejar de lado propuestas que no están amparadas por grandes nombres. Hoy me he propuesto que esto no le pase a Blackspace.