Ayer hablábamos de Kerouac, de la carretera, el viaje infinito y los «road tales«, ese género tan literario que permea gran parte de la cultura estadounidense. Lo hacíamos en la misma web de videojuegos que usted, querido lector, está leyendo ahora mismo. Pero espérese, que si ayer nos poníamos tontos con la generación beat y el amigo Mark Twain pasaba de refilón, hoy toca rescatar a J.G. Ballard mientras lucimos un monóculo y tomamos el gin-tonic más caro, burbujeante y petaleado del local. Así somos aquí.
Submerged, un videojuego en el que estamos atrapados en una ciudad lentamente consumida por las aguas. El paralelismo con El Mundo Sumergido es evidente, pero también algo que celebrar: pocos libros describen con tanto lirismo la belleza primigenia de un mundo que se acaba, en el que el ser humano es un anacronismo. Precisamente la idea de Uppercut Games es ésa: además de putearnos y hacernos recorrer la ciudad en nuestra penosa barca, escalar sus edificios y buscar la salvación, sus creadores quieren transmitirnos la tranquila y desolada belleza de lo que las aguas se llevan.Jeff van Dyck (Total War…) se encarga de esa banda sonora tan bonita que están oyendo y que acentúa aún más el sentimiento de asombro y admiración ante el mundo sumergido.
De momento el equipo sigue trabajando en él, con la idea de lanzarlo en algún momento de 2015 para PC y consolas, y a mí ya me tienen expectante. Está claro que la jugabilidad no se separará de propuestas de otros juegos de aventura y supervivencia (se me ocurre el infravalorado I Am Alive) pero me resulta irresistible esa ciudad ahogada con la que sueño desde que leí el libro de Ballard. Viendo cómo todos mis amores literarios van surgiendo en el videojuego actual, ahora sólo me falta que alguien haga un MMO sobre La Tierra Permanece y podré morir feliz.
Diario de desarrollo de Submerged
