A nadie coge esto por sorpresa porque ya ha habido filtraciones de concept art, mil y una declaraciones con el futuro rumbo que va a tomar la franquicia…Pero ahora es oficial y ya tiene fecha: finales de 2013.
Dragon Age III: Inquisition recoge, argumentalmente, el testigo del final de la segunda parte, y nos propone «salvar al mundo de sí mismo» en plena guerra civil. Prometen elecciones que importen, un mundo enorme por explorar, opciones de personalización amplias…todo lo que no había en el juego anterior.
El juego contará con el motor Frostbite 2 (Battlefield), de EA, y lleva siendo desarrollado «desde antes de sacar la segunda parte». Ahora queda por ver si no cometen el mismo error de no dar demasiado tiempo de desarrollo y consiguen salvar a la saga de sí misma.