Vigil Games
Con lo arcanepunk hemos topado.
Pues eso, que THQ ha terminado de implosionar. Cuando muere una distribuidora que últimamente traía cosas muy bonicas, muere algo de HAMOR en el mundo. Ayer se conocía que ya ha pasado por el equivalente de EEUU de un concurso de acreedores y que ha ido sacado sus activos a subasta.
De entrada prometo no hacer ninguno de esos chistecillos fáciles que he leído en otros análisis de Darksiders 2 del estilo de "Muerte vive", "un juego de Muerte" o "este Muerte está muy vivo". La nueva aventura de Vigil Games merece ser tratada con cierto respeto porque, aunque no alcance la excelencia que hacía presagiar, sí es uno de los lanzamientos más honestos con el jugador y consigo mismo que podemos encontrar.
Jugué a Darksiders hará apenas tres meses. Lo compré a buen precio en Steam debido a la insistencias de algunos personajes que pululan por la red en los que confío ciegamente puesto que a primera vista me parecía un compendio de clichés de varios géneros con un diseño de arte que hacía sangrar mis nobles ojos. El juego resultó ser exactamente eso, lo que pasa es que además era jodidamente divertido y bien compensado. La historia es lo suficientemente interesante cómo para no bostezar (al menos no siempre) con cada escena animada y "Guerra", el personaje principal, estaba lo bastante bien dibujado cómo para disfrutar con cada una de sus pataletas hablando de traición y venganza. Un título tremendamente honesto que te daba lo que ofrecía y que terminé disfrutando enormemente.