Vamos, que se acaba Radical Entertainment como estudio con desarrollos propios (aunque no cierra del todo). Lo han anunciado desde Activision (luego os quejaréis de EA o Ubisoft, pero estos y Bethesda son el mal), aduciendo las flojas ventas de .
El estudio verá su plantilla reducida de manera sustancial y se quedará para labor de apoyo de otros títulos en los que vaya a trabajar Activision.
Como vemos, la clase media de los videojuegos se sigue yendo a tomar por culo. Ya pasó con 38 Studios (Kingdoms of Amalur) y viendo los costes crecientes de producción, seguirá pasando. Esto es algo que explicó muy bien Twinsen en este artículo (leedlo YA), y que también han comentado pesos pesados como Brian Fargo (Wasteland 2): a día de hoy o haces un megatriple A para una desarrolladora poderosísima o el juego más indie de todos con tus colegas en casa. Todo lo demás tiene precios prohibitivos y el margen de riesgo es demasiado elevado.
No me extenderé más porque ya tenemos el artículo de Twinsen sobre el tema (leedlo YA), pero es una GRAN PUTADA. ¿Se asentará finalmente Kickstarter como alternativa que nos salve de este modelo?