COLABORA EN NUESTRO PATREON

MidBoss: Pirámide alimenticia del mal

MidBoss
MidBoss

Perro no come perro, pero parece que esbirro sí come esbirro. O al menos, sucede así en MidBoss, un roguelike con una mecánica lo suficientemente interesante como para hacer que haya posado mi vista en él. Porque, amigos, igual se enfadan conmigo, pero no me gustan nada los roguelikes, salvo alguna contada excepción. Me parece fantástica su mecánica para hacer que el juego sea infinito y no cambie nunca, pero a mí eso de morirme y tener que volver a empezar me frustra ya demasiado. Así que tómense esto como un sello de calidad, o al menos de interés: MidBoss ha logrado pasar esa barrera.

¿Cómo? Con un planteamiento que nació en una Ludum Dare (la 25, You are the Villain), encarnando al secuaz más mierder de toda la mazmorra. El objetivo aquí es convertirse en el puto amo del lugar y para ello tendremos que enfrentarnos al resto de criaturas… y poseer sus cuerpos tras derrotarlas. Porque no vamos a llegar a lo más alto siendo una rata o un cubo de gelatina. El juego aquí estará en decidir cuánto merece la pena subir de nivel nuestro actual cuerpo (pudiendo quedarnos algunas de las habilidades), cuándo atacar a un enemigo tocho para crecer sustancialmente… Una mecánica con un mogollón de posibilidades.Por supuesto, esperen del juego de Kitsune Games lo que toca en este tipo de títulos: muerte permanente (de ahí el aprender a elegir cuándo jugárnosla con otro enemigo), pociones de efectos aleatorios, tesoro, trapicheo de objetos y un modo nuevo juego + en el que conservamos el personaje y empezamos de nuevo.

Si les place, Midboss lleva estando disponible desde hace unos días y las críticas están siendo positivas. Parece que al cóctel le acompaña el esperable sentido del humor, y menos mal, porque nada mataría más ese planteamiento que tratar de tomárselo en serio. Lo tienen esperándoles en PC, Mac o Linux.Página Oficial