El sueño húmedo de muchos linuxeros (y de algunos que pueblan esta casa) parece que se hace realidad. Esa fábrica de sueños llamada Valve acaba de confirmar que próximamente tendremos una versión de Steam para Linux.
La fecha para el desembarco de Steam en Linux aún no está confirmada, pero lo que si está decidido es la distribución elegida, que como no podía ser de otra manera se trata de Ubuntu. Las razones para elegir Ubuntu son variadas, aunque según cuenta en el propio blog de desarrollo de la plataforma, el hecho de que sea una de las distribuciones más estandarizadas es clave para poder trabajar sobre una base sólida.
El reto para Valve es enorme, puesto que se le abren tres frentes al mismo tiempo. Primero tendrá que conseguir portar toda su plataforma a un nuevo sistema operativo sin perder ninguna funcionalidad y manteniendo todas y cada una de las features actuales de sus versiones en Windows y Mac. Segundo porque tendrá que dar ejemplo al resto de desarrolladoras trasladando sus títulos más emblemáticos a este nuevo sistema operativo. De hecho, ya está confirmado que Steam hará su aparición en Ubuntu con ‘Left4Dead 2’ bajo el brazo. Y tercero porque tendrá que animar al resto de su catálogo a portar sus títulos a Linux, y sobre todo, convencerles de que resulta rentable. Aquí una voz muy importante van a ser las desarrolladoras independientes, que pueden encontrar un espacio sediento de novedades y muy receptivo a sus propuestas.
Sin duda alguna una buenísima noticia para el sector (y aún mejor para Canonical), que según como avance puede afectar a la hegemonía de Windows como sistema operativo nativo en la mayoría de los hogares.