Hoy toca hablar de un título ruso. Así somos en Nivel Oculto. Un día hablamos de fútbol, otro de algún juego independiente desarrollado en una lejana cordillera pakistaní y hoy de un videojuego ruso llamado Leviathan: The Last Day of the Decade.
El juego podría decirse que es un cruce entre aventura gráfica, con puzles sencillos, y una narración más lineal, pareciendo más una novela visual, un “elige tu propia aventura” con narración. Esto no es necesariamente malo si lo que cuenta merece la pena, y desde Lostwood LLC se han decantado por el exotismo de una ambientación que combina magia, steampunk y tecnología extraña para ofrecerle algo nuevo al jugador.
La historia nos pone en la piel de Oliver Vertran, un aristócrata en una familia de capa caída que asiste a un evento que cambiará su vida y le aleccionará en una venganza que tardará una década en ejecutar. La misma “Década” que asola el mundo, un acontecimiento que plaga las ciudades de una enfermedad que mata a la canalla y al que sólo los nobles parecen sobrevivir.
A mí el estilo visual (que en cierto sentido recuerda a Dishonored) me ha gustado, y la ambientación me ha parecido una buena idea. He jugado el primer episodio (que es bastante corto, más prólogo que otra cosa) y la cosa arranca bien: puzles muy sencillos, una interacción escasa y una historia que arranca fuerte. A destacar el apartado de la magia dentro del juego y el uso que se le da.
Sus creadores recomiendan que sólo jueguen mayores de 18 años, no porque haya escenas sexuales, sino porque pretenden tocar temas más profundos: política, represión, relaciones, homosexualidad…Por lo pronto en el prólogo no se ve mucho, pero es que tampoco pueden mostrar mucho más en la media hora que dura. A mí me ha abierto el apetito, así que intentaré darle un tiento a todo el juego (que es episódico y aún no ha lanzado su episodio final) para hablaros un poco más de él.
Por lo pronto, si os interesa probarlo, en la web está el prólogo gratis para PC y Mac y están también en Greenlight intentando entrar a Steam.
Descarga el prólogo Greenlight