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1001 Videojuegos que debes jugar: Nitronic Rush

1001 Videojuegos que debes jugar: Nitronic Rush 1

Estábamos tardando en hablaros Nitronic Rush en profundidad, un juego muy esperado al menos por nosotros y también por gente como destructoid, a pesar de ser gratuito y no pertenecer a una gran distribuidora, simplemente algunos de los alumnos más aventajados de Digipen, que se dice pronto. Da casi vergüenza jugar a Nitronic Rush y no haber pagado un duro, es como haber comido en un restaurante de lujo y haber hecho un «simpa». Al lío.

Para poneros en situación, os habla alguien que adora los juegos de carreras arcade, especialmente Wipeouts y Burnouts. Lo primero que llama la atención en este Nitronic Rush es la banda sonora y todo el concept art, sacado de la película más reciente de TRON, con todo ese sonido con sabor Daft Punk y todos los diseños que recuerdan constantemente a la película. Todo ello convierte a Nitronic Rush en una excelente experiencia audiovisual como pocas veces he tenido el placer de disfrutar.

Nitronic Rush se presenta como el primer Survival Driving Game… Aquí pasa como en la música, los géneros se fusionan con otros géneros y ya no tenemos ni idea de que nombre ponerles. Lo importante no es el nombre, es el concepto (que no es nuevo): no nos vamos a encontrar con otros coches durante el juego, pero si que nos encontraremos obstáculos que pondrán a prueba nuestra paciencia y habilidad, por tanto tendremos que sobrevivir a la carrera. Al principio lo importante es llegar, después lo importante será llegar antes.

Para empezar tenemos en el menú principal, dos opciones: Story y Arcade. El modo historia es un auténtico paseo por el juego, en el que cubriremos si cabe un 25% de lo que realmente se puede hacer con nuestro coche, y lo terminaremos enseguida, casi sin enterarnos. Digo un paseo porque aunque si nos encontraremos situaciones complicadas de superar, hasta que no hayamos visto el modo arcade y concretamente el modo hardcore, no seremos conscientes del potencial del juego. Por cierto, no intentéis jugar con teclado y ratón a este juego, si existe un motivo para comprarse un mando de xbox 360 para PC es este. Por último hablaré del modo Stun, en el que tenemos un tiempo límite y podremos hacer el cabra en un entorno abierto para conseguir puntos.

Conceptos que llaman la atención: 1. el coche tiene alas. 2. El coche tiene propulsores en todas partes para poder girar a la derecha o a la izquierda, o dar vueltas en el aire. 3. La pista es un personaje en si mismo. 4. El sistema de control es lo más avanzado que he visto nunca en un juego de coches arcade. 5. La gravedad no es automática. En el modo hardcore descubriremos realmente que es Nitronic Rush, y es donde se combinan realmente bien todos estos componentes y se convierte en una experiencia capaz de mantenerte días pegado a la pantalla.

Como jugador de Street Fighter y otros juegos de lucha, recuerdo muchas tardes en las que he estado enganchado a la pantalla hasta conseguir hacer con un 99% de eficacia un determinado golpe o fatality. Con Nitronic Rush pasa lo mismo: no nos quedaremos tranquilos hasta que podamos superar una pista del juego. En el párrafo anterior he hablado de que la gravedad no es automática, es decir, que cuando por ejemplo en un F-ZERO GX puedes ir por las paredes y cambiar de sentido y el coche se autoadaptaba a la nueva situación, en Nitronic Rush esto no es así, por lo que si quieres saltar en sentido contrario y arriba porque la pista así lo requiere, te darás cuenta de que simplemente con saltar no sirve: hay que saltar, darle la vuelta al coche, y salir corriendo para pegarnos de nuevo a la carretera. Esto quizá contado os puede parecer una gilipollez, pero no lo es y es uno de los ganchos del juego.

Lo mismo ocurre cuando tenemos que continuar por un lateral a gran velocidad: tenemos que saltar con el coche y colocarlo en la posición correcta para después avanzar de nuevo y que el coche se pegue al suelo. La comparación más cercana que he encontrado para explicar lo complejo que puede llegar a ser es tratar de conseguir un utracombo en el Killer Instinct de máquina recreativa: una putada de las que hacen que estés horas hasta conseguirlo.

Esta dificultad tan elevada en cuanto al control del vehículo es precisamente la que a posteriori se encargará de recompensarnos, igual que cuando conseguimos hacer fatalities sin mirar al mando y en cualquier momento. Completar una pista en modo hardcore con todos los cambios de gravedad sin pestañear y preocuparnos más del tiempo que de nuestra habilidad es una sensación muy gratificante que sólo se consigue tras pasar unas cuantas horas jugando. Las pistas no son lineales, existen atajos por todas partes y para todos los niveles, pero aquí no basta con verlos o ser conscientes de su existencia: llegar a ellos es un auténtico reto y continuar en los atajos aumenta la dificultad de la pista considerablemente.

La pista en si misma es un personaje con obstáculos que se mueven, escalones que debemos saltar, giros imposibles, y su diseño es digno de mención. Personalmente hasta ahora las pistas mas complejas de recorrer eran las del F-ZERO GX pero después de experimentar lo que Nitronic Rush tenía preparado han conseguido trastocar el orden mental que tenía en este sentido. Si es cierto que la física del coche está cogida con pinzas, desde luego no es tan compleja como la de Burnout, nuestro vehículo no pesa, pero una vez te acostumbras la sensación desaparece.

Más detalles: 1. Nunca se para la música. 2. Si apuramos el booster el coche explota, y el sonido el booster cuando está al tope se sincroniza con el tempo del juego. 3. Los checkpoints en las pistas están muy bien colocados, sin ser demasiado dificiles o demasiado fáciles, pero desde luego necesarios. 4. Disponemos de listas de puntuación online, y ghosts contra los que batir nuestras propias marcas.

Señores este juego no es que lo recomendemos, es que realmente asienta un nuevo referente en lo que a juegos de carrera arcade se refiere. Es gratis pero de verdad que dan ganas de hacerles una donación por el importe que sea, aunque sólo sea por las horas de diversión continuada y obsesiva que ofrece y su exquisita banda sonora. Es posible que no tenga modo a dos jugadores, o que no haya otros coches contra los que competir, o que la física no esté del todo conseguida o lo que queráis, pero creo que todo eso es lo de menos. Una auténtica demostración de poder independiente.