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Kickstarter, jeta suprema y estudios de mercado

Déjenme que les cuente una historia para empezar.

Corría el terrible año 2008 y yo estaba aún en la universidad. Tenía trabajo, pero al igual que ahora, me gustaba más el dinero fácil que a un tonto las pesetas, así que cuando me llegó la propuesta de participar en una “investigación” por la que una agencia de marketing pagaba 30€ de los de 2008, ni me lo pensé. En mi facultad, que tiene un departamento de neuropsicología muy potente, era habitual recibir un dinerito rico a cambio de tirarse dos horas haciendo todo tipo de tareas aburridas con electrodos en la cabeza, así que para mí era ya algo normal.

Pero no era nada de eso, sino un terrible estudio de mercado para mejorar la imagen del que sería mi futuro alcalde (y lo sigue siendo, ni con agua hirviendo ni confluencias ciudadanas puede uno escapar del peor partido político de la historia). Un coñazo de tarde, con otra gente que no tenía ni idea de política (buenos representantes del electorado potencial…) respondiendo un montón de preguntas y haciendo el imbécil a cambio de 30€.

Volvamos al distópico año 2015, con un vertiginoso salto de realidad y esos treinta euros en la mano. Hagamos una equivalencia euro-dólar como Steam, sin tasas de cambio que valgan, y de repente tenemos treinta feos dólares en la saca. Lo mismo que pide el Kickstarter de Shenmue 3 para llevarse la copia digital a casa.

Kickstarter, jeta suprema y estudios de mercado 2

¡Shenmue 3!  Llevo una cantidad exagerada de años esperándolo, porque su primera parte es de esos juegos que uno lleva grabados en el corazón. Un título con el que podría ponerme a repasar momentos y me tiraría una tarde entera escribiendo sobre cada puesta de sol, cada viejo hecho polvo que nos enseña un nuevo movimiento de artes marciales o el aire salitroso que recorre el puerto.

Ahí lo tienen: soy el target, el público diana del Kickstarter de Shenmue 3, igual que otras personas lo fueron del de IgavaniaNormalmente suelo ojear en profundidad muchos proyectos de crowdfunding, ya sea para sacarlos en la web o para yo mismo colaborar, pero aquí ni miré. Consumido por el hype, lancé (metafóricamente, claro) esos treinta dólares contra la pantalla del ordenador, convencido de que Shenmue 3 dependía de mí para salir adelante.

Y luego me dio por pensar un poco.

¿Qué es esto de anunciar en una feria como el E3 que vas a lanzar el Kickstarter de un juego que la gente lleva esperando más de una década (catorce años desde Shenmue 2)? ¿Realmente bastaba con dos millones de exiguos dólares para convertir el proyecto en realidad? Porque según el propio Yu Suzuki el primero tuvo un presupuesto de 47 millones de dólares… ¿O hay algo más?

Llevo ya un tiempo pensando en el funcionamiento de Kickstarter y otras plataformas de micromecenazgo, y lo que veo no me gusta. Me da la sensación de que muchas veces es más importante ser un desarrollador conocido y evocar a la nostalgia de una generación que echa de menos un determinado género (se me ocurren las aventuras gráficas y los juegos de rol isométricos) que tener algo que mostrar.

Volvamos con Bloodstained: Ritual of the Nightresulta que es el videojuego que más dinero ha conseguido en la historia de la plataforma y no ha mostrado absolutamente nada, salvo unas poquitas imágenes de arte conceptual. Mientras el nuevo proyecto de Koji Igarashi lo petaba muchos otros se estampaban. Juegos que tenían muchas más dificultades para darse a conocer, que tenían que arañar cada pequeña mención en Twitter, que bombardear con notas de prensa a cientos de medios para que una decena se dignaran a sacarlos… Gente que de verdad necesitaba sacar adelante su estrategia de financiación para convertir su juego en realidad. Gente que se la jugaba poniendo vídeos de estados muy iniciales de desarrollo, mostrando pantallas y hasta algún gameplay. Gente que no compite en igualdad de condiciones porque no apela al nombre ni (necesariamente) a la nostalgia.

Entiendo que a estas alturas este tipo de “Kickstarters famosos” más bien sirven como un preorder, porque desde que aparecen todos sabemos que van a salir adelante. Al menos, yo lo he entendido así con juegos como Pillars of Eternity o Torment: Tides of Numenera, como una manera de comprar el juego por un precio menor, aunque luego hubiera que esperar a que lo hicieran. No es necesariamente malo, pero el problema es que estos grandes proyectos coexisten con los demás, y en cierta medida “detraen” fondos: si yo este mes tengo un máximo que me quiero gastar y coinciden varias cosas interesantes, voy a tener que elegir. Y muchas veces elegiré a quien realmente no me necesita.

sony-e3-2015

Entonces llega Shenmue 3 al E3 y todos nos volvemos locos. Pero, joder, ¿en serio te va a dejar Sony presentar tu juego en el E3 si no es algo claro que vas a sacarlo?

Ahora, tras haber puesto el dinero en el Kickstarter, empiezo a mirarlo. Y es cutrísimo. No hablo de gráficos ni mucho menos, sino de su presentación general. Poco más que un brindis al sol, una apelación a lo vivido en los anteriores… Espera, ¿de verdad es necesario mi dinero? Porque me parece evidente que una parte de todo esto la va a pagar alguien, que el micromecenazgo es una porción de la financiación que van a sacar en “preorders“: 29$ por la copia digital y 60$ por la física. Ni siquiera precios más baratos que los habituales de lanzamiento.

Pero es que todo esto pinta peor. Huele a estudio de mercado en el que en vez de preguntarme por mi futuro alcalde y darme 30€ al final para que me sienta menos sucio, me dejan participar a cambio de apoquinar. A estrategia para aligerar los costes de la producción del juego y ver que, efectivamente, hay un público interesado en él.

Miro de nuevo en mi cuenta de Kickstarter y veo los últimos cuatro proyectos en los que he puesto algo: The Frankenstein Wars (15 días y le falta recaudar la mitad), We Happy Few (en situación similar, algo mejor), Outland 17 (no llegaron a los tristes 10000$ que pedían) y Tahira (lo consiguieron in extremis). Los cuatro tienen campañas muchísimo más detalladas y salvo el juego de Compulsion Games, han disfrutado de la misma difusión (que tiende a cero). Si realmente hablamos de mecenazgo, de apoyar un proyecto porque crees en él y te necesitan, se acercan mucho más a la idea. Al menos en mi cabeza.

Así que cancelo la donación a Shenmue 3, pensando que pagaré lo mismo cuando salga, porque es evidente que va a salir. Me atrae muchísimo más que esos otros cuatro títulos juntos, pero nunca jamás me necesitó para nacer. Y mientras le confirmo a Kickstarter que sí, que deseo anular mi contribución, rezo muy fuerte para que los que me hicieron el estudio del infame alcalde, hace ya siete años, jamás descubran la plataforma.

  1. Una gran reflexión y soy de la misma opinión. Desde hace un tiempo he ido pensando también sobre mis “límites con el Crowdfunding” y he trazado una línea semejante: solo aporto para los pequeños con futuro incierto y con propuestas interesantes.

    Que una gran desarrolladora, con el apoyo de un Publisher detrás, monte una campaña para recaudar para un juego que va a ir a estanterías me parece hasta casi ofensivo. Distinto es que una empresa me quiera ofrecer un juego tan innovador y arriesgado que ni las distribuidoras lo quieran tocar con un palo por el miedo a sus estudios de mercado.

    Sin embargo, mi filosofía se tambalea por culpa de Tim Schafer. Si no hubiese lanzado “Broken Age”, no habríamos visto este impulso de proyectos en KS ni se habría revitalizado el género de las Aventuras Gráficas. Pero por otro lado, tiene contactos con inversores y Publishers que podrían haberlo hecho realidad sin hacer crowdfunding…

    1. Lo que dices de Tim Schafer es clave, porque fue el primero en atreverse a sacar un proyecto mastodóntico sin mostrar NADA y teniendo éxito. Quizás en el caso de la aventura gráfica sí es cierto que le hiciera falta sacarla por ahí, porque en Double Fine estaban bastante de capa caída, pero fue el pistoletazo de salida al boom de Kickstarter. También ha sido de los primeros en hacer cositas discutibles (lo de Broken Age, sacar el de Massive Chalice poco después mientras dices no tener pasta para el otro…). No sé, la verdad.

      Pero sí que he hecho como tú: salvo cosas muy muy muy concretas, todo lo que apoyo son proyectos pequeñitos o medianos que creo que de verdad lo merecen y que muestran bastante y se lo curran. Y creo que como consumidores nos toca regular este mercado castigando cosas como el Kickstarter de Shenmue 3.

    2. Pues a pesar de que hizo el “boom” de los kickstarter, es gente como Schafer la que, a la largaa, está perjudicando a los kickstarters más pequeños. Gracias a que, con el tiempo, se ha demostrado que no sólo no cumplen con lo prometido, si no que una vez más, gestionan mal el dinero. Y ESA es la auténtica razón por la que dejaron de tener apoyos por parte de los publishers. Sólo hay que ver lo que ocurrió con la mala gestión de Psiconauts o Brutal Legend.

      Podemos analizar con más tranquilidad todo el asunto, y podría decir punto por punto todas las cagadas sólo del primer Kickstarter de Schafer, si tenemos en cuenta todo lo que ha ocurrido desde entonces hasta ahora. Y podemos seguir hablando de proyectos de grandotes que venden humo, cancelaciones, juegos que al salir están “inacabados”, decepcionantes, que no cumplen ni la mitad de lo que prometían al principio y con videos de famosos queriendo dar pena con sus caras y sus dramas, en lugar de mostrar contenido real. Es todo muy triste. Recuerdo lo mal que lo pasamos nosotros para que nuestro proyecto saliera adelante en kickstarter. Si bien recaucamos más del doble, sigue siendo insuficiente porque, por miedo a la aceptación de un público que no nos conoce, pedimos muy poco con intenciones de capar nuestro proyecto. Mighty Nº 9 estaba a la vez que nosotros. Recaudó muchísimo más, Inafume ni si quiera está haciendo el juego. Tiene pinta de juego “vistoso” para dispositivos móviles, recaudaron más de 4 millones, y aun así se quejan de que necesitan más pasta.

      No sé, yo estoy un poco cansada de la mala gestión que hacen los grandes. Piden menos de lo que necesitan, y ya dentro de esto, cobran sueldazos sin intención de hacer sacrificios para respetar el presupuesto que han conseguido a través de la plataforma. Se creen que lo valen, y quizá lo valen, pero deberían cumplir con lo que dicen. Y la gente debería pensar si merece la pena pagar por algo que no ven, por mucho que admiren a sus creadores.

        1. Hace unos meses escribimos por aquí algo sobre eso, que con la campaña de Broken Age le estaba haciendo mucho daño al crowdfunding en general, porque fue una murga el tema de la pasta 🙁

          De todas formas yo os puse a vosotros y no a Mighty Nº9 😀

  2. No entiendo que es lo que os parece ofensivo, el crowdfunding no está exclusivamente para que los desarrollos innovadores y arriesgados consiguan financiación, es una herramienta que cualquiera puede utilizar y puede ser utlizada bien o no, igual que te puede timar el frutero de la esquina que el alcalde.

    Lo que veremos seguramente en los próximos años es que aparecerán verdaderos “Kickstarter” para indies.

    1. Lo único, más que ofensivo, frustrante, es que gracias a la mala gestión de ALGUNOS de los más famosos (que son los que se difunden como la pólvora), está creciendo la desconfianza por parte de los usuarios a la hora de financiar proyectos a través de un crowdfunding. Y creeme, hay proyectos que no conseguirían financiarse por otros medios, ya descartando totalmente el pedir un préstamo en un banco (que además, quizá ni te lo den).

      Yo creo que más que quien inicia la campaña a través de estas plataformas, la culpa es más de la gente. Tropiezan mil veces con la misma piedra, perdonan o olvidan los errores de los grandes, y son capaces de pagar por algo que no ven. Cuando se sienten estafados, luego el pato lo pagan los pequeños, gente que no conocen y que por mucho contenido real que muestren, no tienen la confianza por parte de nadie. Y lo puedo entender hasta cierto punto, pero no me entra en la cabeza por qué la gente tras ver lo que está pasando, no piensan dos veces antes de pagar por un proyecto del cual sólo han visto 2 dibujos.

      1. Cualquier proyecto de Kickstarter se paga sin realmente ver. Tendrá mas o menos imágenes y videos pero en definitiva ese juego no existe, al fin y al cabo el crowdfunding esta basado en la confianza.

        A mi me molestó ver como Little Devil Inside llegaba a duras penas a su meta, mientras BloodStained sin tener una mierda que mostrar y sin ser nada nuevo consiguió esa marca en menos de 2 horas, pero entiendo que los de NeoStream no son Koji Igarashi ni Tim Schafer, estos primeros todavía no son nadie y entiendo que si la gente va a confiar en alguien, va a ser en alguien con reputación.

        1. No estoy para nada de acuerdo. ¿Me estás comparando 2 bocetos con un video de gameplay real o una demo? -_-…………………………………….

          En fin, por el amor de dios… Es una plataforma para financiar proyectos y terminarlos, obviamente no tendría sentido pedir dinero si ya está el trabajo hecho. Pero sí que hay que hacer un sacrificio y tener algo de contenido inicial antes de pedir pasta o prometer el oro y el moro. Porque 2 bocetos no te garantizan que el juego será como te lo cuentan. Un video de gameplay o una demo (más que nada) sí.

          En caso de Shenmue pienso que lo han hecho mejor que otros, porque han mostrado algo, lo malo es que es más sobre su aspecto visiual que gameplay. Pero al menos no son 2 bocetos. Lo que sí que no me gusta, aunque las intenciones sean demostrar que tienen público, es pedir mucho menos de lo que necesitan. Pueden demostrar que tienen público ya pidiendo lo que necesitaban de antemano, aquí no cambia nada. El gran problema de no hacerlo así, es que muchísima gente que no está metida en la industria (en mayor u menor medida) ahora se hacen una idea muy erronea de lo que cuesta realmente hacer un videojuego, gracias a estas prácticas. Y eso dejando de lado la mala gestión y todo lo que ya comenté anteriormente.

          Yo soy de las que piensa que, por un bien común, espero que todos los proyectos salgan bien y cumplan con lo que dicen. Y así los bakers están contentos, los desarrolladores (grandes o pequeños) también, y luego además no se incrementa la desconfianza hacia los desconocidos, que quizá son quienes más lo necesitan. Todo esto es utópico, pero sería ideal, desde luego.

          1. No, claro que no, alguien con imágenes y videos de juego tiene muchísima más confianza por parte del público que alguien con 2 bocetos, lo que estoy comparando es que el juego este hecho por un desarrollador importante a eso, que siempre esta mejor ver las cosas, eso por supuesto. Pero se trata de quien más te fias para hacer un buen juego, no del que haya sido más transparente o lleve mucho más trabajado en el proyecto.

            Casi todos los proyectos de kickstarter piden mucho menos de lo que necesitan, sean grandes o pequeños, además no puedes pedirle total transparencia a ningún proyecto de Kickstarter, no puedes airear así como así, lo que te de o lo que necesitas que te de un inversor, los contratos tienen clausulas de confidencialidad y en estan en base a unas condiciones, como podría ser el mismo éxito en Kickstarter

            Estoy de acuerdo en que Kickstarter se juega el tipo con Shenmue y BloodStained y, que si no salen bien, pueden dar una mala imagen al crowdfunding en general, pero igual que pasaría con cualquier otro proyecto ambicioso de crowdfunding, Star Citizen por ejemplo.

  3. Ese es el problema, que muchos (aunque al final te hayas retractado) os tiráis como bestias a las promesas de revivir viejas glorias (el chumume 3 este o cuando la Double Fine Adventure) mientras dejáis podrirse proyectos que son realmente innovadores y necesitan de verdad del apoyo de una campaña de crowdfunding. Los mismos que se llenan la boca con “Yo no quiero gráficos buenos, sino juegos interesantes” son los que gritan y jalean en el E3 cuando sale la undécima entrega del COD y similares.

    Al final es el consumidor el que manda, y si el consumidor lo que quiere es la misma mierda una y otra y otra vez, las empresas (que no son tontas) siguen dando mierda una y otra y otra vez…

    Hasta que solo quede mierda, porque el resto nos habremos cansado de intentarlo.

    1. Estoy de acuerdo, pero a mí no me metas en el Eje del Mal por un desliz 😀

      En esta web sacamos un porrón de cosas interesantes y damos espacio a muchos proyectos pequeños, y yo mismo entre Kickstarter e Indiegogo llevo como 40 proyectos apoyados y el más gordo es Pillars of Eternity. Pero vamos, que el artículo lo he escrito para eso, para concienciar a la gente para que no suelte el dinero a toda prisa 😉

      1. Ciertamente, me he dejado llevar “un poco” por el estrés del momento. No pretendía meterte a ti ni a la web en ningún eje del mal, mis disculpas.

  4. Pues yo tengo opiniones dispares, aunque también soy de los que piensa como Javier Alemán que esto del Shenmue 3 ha sido una patada en los cojones en toda regla.

    Por un lado, me parece algo normal y muy humano el desconfiar de primeras si no te has labrado un nombre. Vale que la mayoría de estos ahora son viejas glorias, pero algo bueno habrán hecho para ganarse ese título y, quieras que no, eso da más confianza que un Kickstarter de alguien a quien no conoce nadie. Por lo tanto, también encuentro normal que el desconocido se lo tenga que currar más. Y, por lo tanto, también encuentro normal que la gente tienda a no backear proyectos por esa misma desconfianza. Lo “raro” sería lo contrario. Al fin y al cabo, depositando tu dinero estás depositando tu confianza y si esa confianza no se la entregas a un amigo así como así, mucho menos se la vas a entregar a un desconocido.

    ¿Que es injusto? Obviamente. Pero hablamos de una industria saturada hasta las trancas de juegos y proyectos, de un ambiente empocilgado donde, por ejemplo, los desarrolladores se pasan al juego móvil para sacar pasta “fácil” en lugar de hacerlo porque aman el medio y luego pasa lo que pasa. Y, claro está, de una industria con muchísima gente donde hay desde gente que lleva toda la vida amando esto hasta casuals que se suman al saco por la moda de agitar el mando. Y en ese saco va gente de todo tipo de gustos y colores.

    En mi caso particular, salvo las apelaciones a la nostalgia puntuales, que locuras de vez en cuando cometemos todos, je je, (Bloodstained y Mighty No. 9), no suelo mirar quién hace un proyecto, me la sopla. Veo lo que me van a querer dar y obro en consecuencia (he backeado más de una docena de proyectos). Pero sí espero que me den siempre un proyecto que esté a la altura de la pasta y confianza que voy a depositar en ellos, ya sean Miguel y Paco los programadores del barrio como el mismísimo Tim Schafer.

    En resumen, lo que sí que no estoy dispuesto es a que Sony se ría en mi cara y quieran que les pague por adelantado una parte del proyecto. Y por eso yo también he cancelado mi aportación al Shenmue 3, ya lo pagaré en una Steam Sale o similar.

    PD: Olé tus huevos, Javi.

    1. Sí, si está claro que lo lógico es tirar por quien conoces que hace las cosas bien, es lo natural.

      El problema es que muchos se han aprovechado para sacar pasta sin mostrar nada, como Schafer o Igarashi, y eso me toca un poco la moral, porque Pepe y Paco me han subido un alfa de gameplay, un cuadrito que explica en qué va cada parte del dinero, un porrón de concept arts y demás. Y claro, esa gente DE VERDAD se está jugando el cuello y el dinero para sacar el videojuego por el que han apostado, mientras que los otros van a ir luego a sacarse la chorra ante una publisher y darle con ella en la cara para que pongan la pasta que falta.

      Pero vamos, que es lógico confiar en quien conoces. Pero que no se pasen de listos, ¿no? 🙂

    2. Entiendo esa lógica de la que hablas, pero no entiendo por qué la gente sigue apoyando a personas, que por muy famosas que sean, han demostrado ser unos fantasmas. Como Double Fine, en su segundo crowdfunding ya teniendo problemas con el primero, no tardaron mucho en recaudar mucho más de lo que pedían.

      También he visto numerosas quejas de personas que han pagado por un producto que prometía ser de una manera (con dos bocetos de muestra, o ni eso), y ha terminado capadísimo, mediocre, e incluso cancelado.

      La gente no aprende, y luego pagan el pato los grupos pequeños. Que sí, es normal que nos lo tengamos que currar más, lo entiendo, pero también hacemos más sacrificios y mostramos lo que estamos haciendo en lugar de hacer un video mendigando y prometiendo cosas que no sabríamos si podríamos cumplir.

      Esa es la crítica, que la gente paga los errores de unos con los otros.

  5. Puesssssss… no.

    Esta es la democracia del dinero, y yo percibo un error en el planteamiento inicial, y es que “Si pongo dinero en el Crowdfunding del Grande, el Pequeño se queda sin pasta. ¡Las grandes empresas no deberían hacer Crowdfundings!”.

    ¿Acaso si ves el juego de [Inserte aquí el nombre “grande” que más rabia le de] en tu tienda/plataforma favorita no lo vas a comprar? Quiero decir, sea por crowdfunding o no, si quieres ese juego, lo vas a comprar. Vas a tener que decidir igual, sea o no crowdfunding. Alguien se va a llevar tu dinero (porque te ofrece el producto que quieres) y otro no se lo va a llevar (porque o no te interesa o no puedes, que la crisis es lo que es), sea o no crowdfunding.

    La nostalgia vende. Los clásicos venden. Los remakes venden. Los nombres venden. Bienvenido a la sociedad de consumo, donde un videojuego es un producto de entretenimiento de lujo y la gente que compra analiza su inversión menos que el precio del cubata en el bar. ¿59,99 por el enésimo título de la franquicia de pegar tiros en primera persona de siempre? ¡Mejor me pillo el pack super-DLCs por 89,99!

    Y sin embargo…

    Y sin embargo, este es el mejor momento de la historia para los desarrolladores independientes. Para los one-men army de los videojuegos. Para los innovadores y los vanguardistas. ¿Alguien se imagina que habrían podido sacar JOURNEY en los 80-90? ¿Alguien se imagina la respuesta que hubiera recibido de una major? ¿Cuantos juegos imposibles de hacer “a ciegas”, sin un crowdfunding, han salido adelante?

    La mayoría del mundo quiere mierda. Su mierda de siempre, su mierda de un juego nuevo de la saga cada año. Es la Ley de Sturgeon, y francamente, el crowdfunding JAMAS iba a cambiar eso, de ninguna de las maneras. Porque los que ponen dinero en las mierdas, los que ponen dinero en los grandes nombres, no lo iban a poner en el proyecto pequeño. Nunca. Jamás. Porque incluso aunque el proyecto indie hubiese pasado el filtro de la compañía y hubiese acabado en las estanterías de las tiendas de videojuegos de los centros comerciales, el resultado hubiera sido el mismo. “Call of Warfare Wathever: Tiros y Más Tiros” no compite con “Gone Home”, el dinero de estos dos proyectos no sale de los mismos bolsillos, no se molestan unos a otros. Si el próximo Lara Croft saliera en Crowdfunding, el efecto sobre los indies sería 0… O incluso sería positivo, como han demostrado los números:

    https://www.kickstarter.com/blog/blockbuster-effects

    En efecto, los grandes nombres no roban dinero a los indies: Atraen a nuevos usuarios a las plataformas de crowdfunding, que como se ha demostrado repercute positivamente en muchos otros proyectos. Incluso los proyectos catastróficos ha resultado, como se ve, beneficiosos para la comunidad. Sin Double Fine y su éxito, se puede argumentar que habría miles de juegos indie menos en el mercado. Con números.
    Y no seamos ingenuos en el asunto de los Grandes Nombres: Los Grandes son Grandes porque han hecho su trabajo con anterioridad. Monte Cook no saca adelante un crowdfunding por su cara bonita, lo saca porque su nombre está en las portadas de muchos productos de calidad con miles de fans. Y si eres, no sé, Denis Dyack, pues te pasará lo que te tiene que pasar, que da igual las veces que lo intentes, te comerás un mojón como un piano de grande (¡Hola, Shadow Of The Eternals!).

    No apoyo Shenmue 3. Ni siquiera sé de que va, ni he jugado al 1 ni al 2. Tampoco apoyaría un Total Warfare Modern Edition Call Of Sumadre. No me interesa, no es lo que yo busco, no lo quiero. No me interesa aunque venga de un estudio indie de Uzbekistán. Pero si Sony, o Microsoft presentan un proyecto que me interesa, lo apoyaré sin dudarlo. Y si un desarrollador independiente presenta un proyecto que me interesa, lo apoyaré sin dudarlo. Y si ambas cosas pasan al mismo tiempo (que dudo mucho que ocurra), pues tendré que asumir que los fondos son limitados y que podrá aportar al proyecto que más me interese de los dos. Sea en crowdfunding o sea en la estantería de la tienda física.

    1. Permítame felicitarle por el comentario. Largo, estructurado y argumentado. ASÍ SI. Ahora bien, creo que parte de una premisa equivocada, y es la equiparación de la compra (llámelo compra, llámelo soltar dinero a futuro) de un producto en Kickstarter con el de la compra de un producto normal. Cuando un usuario adquiere un producto normal está adquiriendo un bien tangible (por mucho que lo compre en Steam), es decir, lo compra y lo tiene. Cuando un usuario invierte pasta en apoyar un proyecto es un bien a futuros. Esto hace que debido a que la mayoría contamos con una cantidad limitada de parné, las inversiones a futuro sean en la mayoría de los casos inferiores a las compras tangibles.
      Hasta ahora, esa pequeña cantidad se dedicaba a proyectos independientes en Kickstarter porque era lo que había. Desde el comienzo ha sido una plataforma utilizada por los desarrolladores independientes para exponer propuestas más o menos arriesgadas cuya financiación sería complicada por otro lado. Si ahora también entran los desarrolladores fuertes dentro de Kickstarter (cosa lícita por otra parte), las fuerzas van a volver a estar descompensadas, puesto que todos somos humanos y como bien dice usted, la nostalgia, los remakes, los grandes nombres VENDEN. ¿Servirá esto para atraer gente a Kickstarter? Sin duda ¿Servirá para que inviertan en desarrollos independientes ahora que ya conocen la plataforma? Lo dudo.

    2. Yo también pienso que la cosa no iba por ahí. De hecho, no se ha comentado que los grandes no tengan derecho a financiarse de esta manera. Ni que el hecho de que lo hagan afecte a segundos. Más bien, o al menos así lo entendí y así lo compartí, el problema es cuando te venden humo y ese humo se convierte en algo totalmente distinto al final. Tan rápidamente como se difundió el proyecto famoso hecho por X celebridad, si hacen mal las cosas, eso se difunde igual de rápido y afecta a toda una comunidad. Quienes más se van a resentir, son los grupos pequeños. No me gusta llamarlos “indie” porque de indie lo que yo de monja. No considero que quienes estemos pidiendo financiación externa seamos ni si quiera independientes económicamente ni de nada, simplemente somos grupos pequeños haciendo proyectos de bajo presupuesto.

      Es verdad que todos piden menos de lo que necesitan, pero también los hay que piden más. Esas confusiones que se reflejan hacia el usuario medio, `puede hacer que la desconfianza al pagar en otra campaña de crowdfunding sea mayor. Vemos un grupo desconocido pidiendo 400k por un proyecto que realmente los vale, y puede salir la tropa de gente diciendo “ke ezo no bale el juego porke X famozo a pedido menoz i hestas eztafando”. Joder, si te contara la de tonterías que nos han dicho a nosotros a lo largo de los dos años cuando hemos recaudado sólo 20k de los cuales se han terminado reduciendo a casi la mitad a base de porcentajes a amazon, kickstarter, impuestos en USA y muchas perlas. 2 años, 4 personas en un equipo, y 13k dólares. Y nos llaman ladrones, que nos aprovechamos de la nostalgia de la gente (y el proyecto es nuevo, no es un remake) y mil historias a las que hemos hecho oidos sordos porque no son comentarios productivos. Pero está clarísimo que el mal uso de esas plataformas ha pasado factura.

      El problema no es el que hace el kickstarter, el problema aquí es que la gente no aprende ni a patadas.

  6. Según las últimas informaciones Sony no va a portar nada para el desarrollo del juego. Solo se encargarían del Marketing y de la conversión del juego a PS4. Por lo que Shenmue 3 si va a ser financiado casi en su totalidad por los fans. Yu Susuki habla de que se necesitan $10 millones para hacer el juego que todos queremos.

    1. Hay muchas informaciones raras por todos lados, porque también Yu Suzuki ha dicho que hay varios financiadores de los que no puede hablar por contrato. Igualmente, muchas veces el marketing es casi tan caro como el desarrollo, así que sigue siendo una pasta rica. Yo sigo sin creerme que con 10 millones hagas un juego de mundo abierto cuando el primero costó 47 🙁

      1. He oído que esa cifra de 47 millones, corresponde por el desarrollo de los dos primeros Shenmue y también por el desarrollo de la versión para Saturn que nunca llegó a salir. Si, siguen sonando poco 10 millones pero si en el apoyo de los fans el juego no se va a dar, no va a llegar un inversor a poner millones para el desarrollo sin imponer condiciones, cosa con la cual Yu Susuki no esta de acuerdo.

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