Que le den al E3, a la xbox juan y a la PS4.
Lo que somos capaces de hacer los treiteañeros respecto a anteriores generaciones, donde la tónica era preguntarnos con menos de 15 años si estudiábamos o trabajabamos, y nosotros mientras jugando al Duck Tales entre otros, uno de esos juegos que en mi casa por lo menos pasó sin pena ni gloria, pero que siempre recordaré al lado de chip and dale, o de otros que no me hubiera comprado, pero que al dejarmelos alguien me los terminé casi sin darme cuenta... algunos nos dedicamos a hablar de ellos en un blog, otros como este tipo se encarga de recordarnos la banda sonora.
Siempre me encantó el nombre de Nintendo Entertainment System, no puede ser más claro: se trataba del sistema de entretenimiento de Nintendo, desde luego no podía ser más evidente. Tuvo un éxito sin precedentes para la compañía y resulto un duro golpe en todos los hogares en los que había ordenadores exclusivamente para jugar, ya que éstos eran bien demasiado complicados o bien las cargas de los juegos eran demasiado largas, por no hablar de los gráficos y el sonido. Realmente era lo más parecido a disponer de una máquina recreativa en casa, o al menos, esa era la sensación que yo personalmente tuve cuando para reyes me regalaron una NES.