DustGrave: Sandbox en un mundo arenoso

DustGrave: Sandbox en un mundo arenoso 2

Hay que tener mucho valor para, en general, tratar de sacar adelante un videojuego. Pero es que hay tener aún muchísimo más valor para atreverse a sacar adelante un videojuego de rol. Y tras el lanzamiento de Baldur’s Gate 3 (ya más lejano en el tiempo Disco Elysium) hay que estar prácticamente mal de la cabeza para animarse con un videojuego de rol isométrico. Y aquí vamos a alabar siempre ese tipo de temeridades. DustGrave es lo nuevo de Innervoid Interactive, un estudio italiano al que tengo cierto cariño y que ya como primer proyecto presentaron en plena burbuja de Kickstarter el interesante Zahira, un RPG isométrico que no pudieron sacar adelante precisamente por ese exceso de ambición. Volvieron a intentarlo bajando de escala con el diminuto e interesante ICY y luego Chef: A Restaurant Tycoon Game (este último no lo conocía). Pero se ve que el gusanito del rol les quedó, porque DustGrave es, de nuevo, rol isométrico; y de nuevo, tiene una escala más ambiciosa.

El otrora imponente Imperio Dahliano se ha resquebrajado, derruido por una plaga misteriosa y las crisis internas. Mientras los poderes supervivientes y naciones vecinas tratan de reclamar la mayor cantidad posible de sus tierras, los aventureros y mercenarios tratan de aprovechar el momento para adentrarse en las innumerables oportunidades que surgen. Tú puedes ser uno de ellos.

Con DustGrave pretenden nada más y nada menos que encontrar ese Santo Grial que es el del juego de rol realmente reactivo, la caja de arena que se amolda por completo a los deseos del jugador. Para hacerlo prometen contar con un mundo persistente con un montón de facciones, libertad absoluta de nuestro personaje y todos y cada uno de los NPCs con nombre y vida propias, que se verán trastocadas o no por la interacción con nuestro avatar. A eso hay que añadirle un sistema de reputación y de memoria, con lo que todo lo que hagamos quedará registrado y el mundo reaccionará ante nosotros. Y no sólo ante nosotros, porque el batiburrillo de facciones también se enfrentará y relacionará entre sí. Añadan combate por turnos y sigilo a la mezcla y queda una cosa bastante completa.

Como ya les he dicho, yo admiro mucho la temeridad que es intentar, ya sólo intentar, hacer algo así. Y me gustaría mucho que lo lograsen porque hay cosas aquí que me recuerdan a Zahira, ese primer proyecto que nunca pudieron sacar, así que estaré atento para contárselo a ustedes cuando llegue el momento.

DustGrave llegará a PC en algún momento de 2024, y como queda mucho hasta entonces (no tanto), vayan preparándose con nuestro calendario indie.


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