Tercer y último episodio de la serie de cortos animados basados en el universo Dishonored. Este capítulo mantiene, y si me apuras, eleva el tono melancólico de la primera y la segunda parte.
No se que opinaréis del tema, pero a poco que en el juego conserven la elegancia y el tono melancólico de estos cortos junto con un gameplay aceptable, a mi me lo tienen vendido. Aunque no se, a algunos profesionales del sector no pareció gustarles demasiado.
Dishonored es el típico juego para… Para… Para ocupar espacio en una estantería y reírte un poco de la IA.
— Gina Tost (@GinaTost) junio 5, 2012