Una tarde normal en mi casa: los dos seres humanos que la habitamos pegando voces cada dos por tres para que alguno de los tres gatos que la dirigen no tiren cualquier cosa que encuentren por su camino o terminen de cargarse los sofás afilándose las garras. Y tú, si tienes gatos, sabrás que ESTO ES ASÍ. Nuestros señores felinos mandan y nosotros obedecemos, y si al final deciden cargarse cualquier cosa, es NUESTRA CULPA por dejarla a su alcance.
Los videojuegos, muchas veces, quieren «empoderarnos», que diría un sacacuartos. Nos hacen ser quienes no somos para que sintamos todo el poder en nuestras manos: un marine hipermusculado que acaba tirándose a todo lo que se mueve, un conductor de cochazos con los que huir de nuestro trabajo de oficina y Seat Panda (¿se siguen fabricando?)…así que, ¿por qué no llevar ese sentimiento de omnipotencia gatuna a la pantalla de nuestros ordenadores y hacernos sentir por un momento el PODER ABSOLUTO?
Es lo que ha pensado Chris Chung a la hora de diseñar Catlateral Damage, un juego en el que haces de gato que, por imperativo felino, debe destruir todas las posesiones de su dueño. El título vio la luz gracias a un 7DFPS (iniciativa para sacar FPS innovadores) y está en fase alfa, con una única habitación por la que trastear, pero el creador ha dicho ya que va a desarrollarlo para que sea más grande y tenga más opciones.
Eso es, romper y joder todo lo que existe, y es condenadamente divertido.
¡Si hay hasta combos por cargarte varias cosas a la vez! Ahora falta una opción para ponerte a maullar sin parar en medio de la noche, y otra para correr como un puto condenado mientras lanzas zarpazos a las piernas de tus seres queridos y el juego será perfecto.
Ya está en Greenlight esperando vuestro voto y podéis darle vuestros dies aquí. Y si os interesa el juego completo, sabed que este año aparecerá, aunque no hay más fecha que ésa.Juégalo aquíVía: Indiestatik
