Orbit demuestra una vez más la importancia del sonido en un juego.
Orbit
Año Nuevo y... no, la verdad es que por aquí seguimos igual. Algo más gordos (si cabe) debido a las comilonas familiares pero poco más. Continuamos con un mono que recorre internet buscando interesantes desarrollos independientes y nos ha recomendado encarecidamente (tirándonos sus heces) que le echemos un vistazo a Orbit.