Realizar una representación de la sociedad a través del videojuego ha sido la obsesión de varios desarrolladores a través de la -no tan- corta historia del medio. Entre ellos hay que distinguir los que han optado por dar su visión y los que han elegido otorgar las herramientas al jugador para que, de manera comunitaria, sean estos los que creen la propia historia del juego. Ahora mismo estarán pensando en varios MMORPG, pero no, la mayoría de estos universos persistentes online dejan muy poco margen al usuario sobre cómo construir su vida. Jason Rohrer ha tenido una idea que quizás le ha quedado algo grande, pero no se puede negar que vivir toda una vida en una hora tiene su encanto.
Voy a intentar explicarlo lo mejor posible. One Hour One Life nos propone jugar durante una hora la vida completa de un personaje en un mundo persistente en el que los demás jugadores estarán haciendo lo mismo que tú. Cada año de vida es un minuto en el juego hasta llegar a los sesenta, donde la esperanza de vida de nuestro avatar tocará a su fin. Durante este tiempo pasaremos por todas las etapas propias del individuo, necesitando cuidados específicos de otros jugadores durante los primeros minutos de nuestra tierna infancia, buscando pareja y teniendo críos que a su vez serán otros jugadores…etc. Su autor lo cuenta así:Entiendo lo que trata de plantear Rohrer y me parece interesante como experimento, pero no puedo dejar de encontrar lagunas a la propuesta. One Hour One Life pretende que nos sintamos nosotros mismos durante una hora en un entorno virtual, pero parece que nos obliga a seguir unas doctrinas bien claras a la hora de poder perpetuar la existencia del propio juego. Si nadie de los que se encuentren jugando tiene hijos esto se acaba. Por otra parte se asume una heteronormatividad que deja poco margen a la identificación con cualquier rol de género que no sea el habitual, algo que al ir unido a la crianza como única vía válida para existencia puede conferir un discurso que no encaja demasiado bien con el año en el que nos encontramos.
A pesar de todo esto no cabe duda de que la propuesta es interesante y que dependiendo de las opciones que Rohrer haya puesto sobre la mesa, One Hour One Life puede resultar una experiencia muy interesante. Si desean saberlo pueden pasarse por su página oficial (botón de abajo) y adquirirlo para Windows, Mac o Linux por $20, pues de momento parece que no planea sacarlo en ninguna de las plataformas habituales de distribución.Página Oficial