Mi primer contacto con el mundillo Warhammer, más allá de reírme de los frikis con muñequitos de la mesa del fondo mientras compraba manuales de rol en una tienda ya cerrada, fue la saga Dawn of War. A pocos videojuegos habré dedicado tanto tiempo en mi vida, si sumamos el primero y el segundo, con sus respectivas expansiones. Entiendo que todo esto os dé igual, pero espero que os sirva de introducción a lo que está por llegar. Porque aunque acabé metido hasta los codos en el mundillo de Warhammer 40.000, apenas sé nada de Warhammer Fantasy.
Mordheim: City of the Damned, está construido sobre este último. Es un juego de estrategia por no-exactamente-turnos en el que capitaneamos a un grupo de desharrapados que se dará de hostias con otro hasta llegar a la cima de la otrotra gloriosa Mordheim, capital del Antiguo Reino, ahora devastada por un cometa. Las facciones incluyen a las Hermanas de Sigmar (monjas guerreras), los Skaven (hombres rata llenos de carisma), Mercenarios Humanos y el Culto de los Malditos (no-muertos).
Entre las cosas más interesantes está la campaña que ofrecen (una por cada bando), con escenarios procedurales, y la gestión de las unidades. Son distintas clases de personaje, totalmente personalizables (armas, armadura, hechizos), y cuentan con un rasgo de heridas permanentes (si caen en combate) que pueden hacer que acaben perdiendo una pierna y tenga que ser sustituida por lo que encontremos por ahí (por ejemplo).Del juego se encargan Rogue Factor (estudio indie formado por gente que ha participado en cosas como Blood Dragon, The Secret World, Heavy Rain…) y está previsto para 2015, aunque en breve aparecerá en Early Access.
Insisto, no conozco mucho sobre Warhammer Fantasy, pero me gusta más un RTS que a un tonto una tiza, y más si tiene toques de rol, así que echaré un vistazo por vosotros a ver qué sale de aquí.Web de Mordheim