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Unpacking a través de la música de Jeff van Dyck 1

Unpacking a través de la música de Jeff van Dyck

Desempacando una vida

Unpacking es uno de los videojuegos que más ha llamado la atención en los últimos meses, por su inesperada forma de conectar con las personas que lo han jugado, contándonos una vida a través de los objetos de un personaje que desempacaba sus pertenencias cada vez que cambiaba de casa. Pero esta historia no nos la ha narrado únicamente un puñado de píxeles en tonos pastel ni mil efectos de sonido para cada uno de sus objetos, esta historia también nos la ha contado su música, y sin ella, el viaje emocional que culmina en Unpacking a life posiblemente no habría sido el mismo.

Cuando empezamos a trabajar en Unpacking, Wren Brier, Tim Dawson y yo tuvimos una conversación acerca de los estilos musicales para el juego”, explica Jeff van Dyck, el compositor de la banda sonora de Unpacking. “Escuchamos un montón de géneros diferentes y, sabiendo que el estilo artístico iba a ser pixel art, tenía sentido usar un estilo de música chiptune”. Pero esta música en 8-bits que servía para potenciar el apartado gráfico del juego también implicaba ciertas limitaciones, que podían verse reforzadas utilizando otros sonidos como los de la guitarra acústica, “queríamos que la música tuviera un toque emocional”.

Unpacking comienza en una habitación infantil, que debemos llenar de peluches, de juguetes y de libros: “la música empieza alegre, sencilla y despreocupada”. Pero su protagonista pronto empieza a crecer, a cambiar de casa, a tener más espacio y también más objetos, más libros, otras compañías que suponen nuevas limitaciones en el puzle de encajar su vida en un nuevo hogar, “a veces la música se vuelve melancólica, e incluso triste”. Con la evolución de su protagonista, la música también “se vuelve más compleja”, con las nuevas personas que llegan a su vida se hace necesario introducir “otros instrumentos acústicos” que reflejen a cada uno de esos personajes, y a la hora de incorporarlos se optó por emplear instrumentos individuales que pudieran destacar por sí mismos “en vez de grupos de instrumentos acústicos que competirían entre sí.” Para Jeff van Dyck, la música de Unpacking es un elemento clave a la hora de que conectemos con su protagonista, ayudándonos a entender sus sentimientos.

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Aviso: a partir de este punto hay spoilers sobre el final de Unpacking.

Sin contar con otras formas artísticas, el ukelele es uno de los elementos más importantes en la vida de su protagonista, y curiosamente no escuchamos la música de este instrumento hasta el último nivel. “Tal vez el personaje principal no estaba listo hasta entonces.” Casi sin que nos demos cuenta, tras pasar por muchos momentos diferentes de una vida, cientos de libros colocados en estanterías después, Unpacking se acaba. Hay muchas formas diferentes en las que este videojuego podría haber terminado, pero sus creadores decidieron hacerlo de una manera muy concreta: poniendo una canción en los créditos finales, creando Unpacking a life.

Wren Brier, directora creativa de Unpacking, tenía claro desde el comienzo del proyecto que quería poner su voz en la canción de los créditos, para la que ya tenía algunas ideas en cuanto a la letra y a la melodía. “Le pedí a Wren que me mandara una grabación de ella cantando su idea y que empezáramos desde ahí.” Cuando Jeff escuchó aquella grabación por primera vez quedó maravillado, “como no había trabajado con ella antes, no conocía su habilidad musical”, y pensó que el público conectaría inmediatamente con su música: “hay pureza y sinceridad en las palabras y la melodía”.

A la hora de crear la música de un videojuego, como ya hemos visto al comienzo del artículo, se tienen que valorar todas las posibilidades para dar con el resultado adecuado, el que más encaje con la experiencia que quieres transmitir. Del mismo modo que se pensó en el chiptune como el estilo principal para la banda sonora, se pensó en Unpacking a life como una nana. “Una nana es algo que habitualmente cantas al final del día o antes de dormir. Es tranquila y apacible. Queríamos que el juego acabara en una nota suave, agradable, emotiva. El personaje principal ha pasado por un viaje, y era una oportunidad para que la canción guiara al jugador a reconsiderar lo pasado y sus sentimientos. Mudarse con una pareja es un momento muy emocional en la vida de cualquiera, y en esta canción resuena eso.

Unpacking a través de la música de Jeff van Dyck 4Una de las cosas que más me llama la atención de esta canción final es que sea tan explícita, cuando todo el juego se basa en desvelar una historia sin la necesidad de palabras, aplicando a lo largo de su desarrollo un ejercicio de “mostrar, no contar”. Pero tras todas esas vivencias intuidas, Jeff van Dyck creyó que era el momento de “suavizar eso un poco”. “Le cantamos a la gente una canción cálida, y les damos un pequeño empujón para que sepan cómo es mudarse con alguien que amas.” Pero Unpacking a life no se limita a ser esa canción que se escucha de fondo mientras van pasando los créditos finales “Wren y Tim añadieron subtítulos a la canción para que todo el mundo pudiera entender la letra. Es el punto álgido del juego, por lo que ha habido muchas reacciones emotivas a este momento.

Tal vez llegando a los créditos hayas sentido la tentación de apagar la consola, sin embargo la experiencia de jugar Unpacking no estaría completa sin Unpacking a life, “la canción es como un suejetalibros, o un punto y final en una oración. Es, además, la recompensa por acabar el juego”. Y por ello, por toda esta aventura visceral que nos ha llevado hasta escuchar Unpacking a life, no podemos sacarnos la canción de la cabeza, no podemos dejar de cantarla, porque es una melodía muy dulce, con una letra muy positiva, que hasta nos hace sentir ganas de hacer una mudanza y desempacar nuestra vida.