Hablaba ayer de Prisonscape y de cómo los videojuegos sobre prisiones son escasos, siendo un género con tantas posibilidades. Por el camino he recordado otro más, Zone 22, con su campo nazi de reeducación en el futuro alternativo en el que han ganado. Y un poco para contradecirme, me guardaba otro as bajo la manga: The Breakout.
El juego de Pixel Trip Studios nos lanza a un campo de prisioneros de guerra en plena Segunda Guerra Mundial, en un guiño más que evidente a películas como La Gran Evasión. Encarnamos al teniente Guy Kassel, un antiguo ladrón que tras una vida de vicio se ha reconducido gracias a su prometida. Pero, evidentemente, tras haber sido apresado no tiene forma de volver a ella. Encima al pobre hombre le ha tocado el peor de todos los campos de internamiento, el muy alemán Verdammen Hof. Pero eso tampoco le detendrá.
Asumiendo una jugabilidad a medio camino entre el point & click y los videojuegos de sigilo, podremos recorrer el campo de prisioneros, quedarnos con las horas de patrulla de los guardias, relacionarnos con otros detenidos e intentar que nos ayuden…Todo en pos de conseguir escapar. Eso sí, los creadores del juego son muy claros al respecto: esto es el mundo real y los intentos infructuosos de fuga tendrán consecuencias jodidas.
Del juego han hablado en medios bastante grandes, como RockPaperShotgun o Eurogamer, y ha pasado el filtro de Greenlight en menos de dos semanas. Y sin embargo, tiene su Kickstarter cuesta arriba y no sé muy bien por qué. ¿Qué es lo que falta para que esa popularidad se traduzca en apoyo por parte de la gente?
A mí desde luego la idea me encanta y el diseño tan anguloso (previamente era pixelart, pero lo descartaron) me recuerda a Dead Synchronicity, por lo que es un win-win. Y si os animáis ahora, todavía quedan contribuciones de 8 libras (unos 11€) para llevaros el juego cuando salga.Kickstarter