Pocos periodos en la vida son tan interesantes, desde el punto de vista narrativo, como la adolescencia. Da igual si se trata de Louisa May Alcott, John Huges, Bret Easton Ellis o Gus Van Sant. Todos ellos han utilizado este periodo convulso por el que todos pasamos para desarrollar diferentes visiones del viaje a la madurez y crear un icono occidental sobre la misma. Lamentablemente lo mainstream ha ido abandonado sus inquietudes sobre este periodo, dejando que sea el cine y la literatura independiente la que siga escarbando sobre el significado de “hacerse mayor”.
Tenemos varios ejemplos que tratan este apartado dentro del videojuego en mayor o menor profundidad. El más conocido seguramente sea The Last of Us, pero ahí están el reciente Life is Strange o Gone Home, el cual me sigue pareciendo la mejor representación del género. A este selecto grupo se une OXENFREE, desarrollado por Night School, un estudio formado por ex-miembros de Disney y Telltale, cuya saga The Walking Dead tiene mucho de paso a la madurez.
OXENFREE nos propone controlar a Alex, un adolescente que acude junto a su recién nombrado hermanastro Jonas a una fiesta en la costa de una isla cercana a su ciudad natal, la cual se dice que está encantada. Lo que empieza siendo una agradable noche de hoguera y cervezas se va conviertiendo poco a poco en una oscura pesadilla debido a una grieta fantasmal abierta de manera accidental a través de una radio de camping. Suena loco, lo sé, pero en traíler todo parece encajar como un guante.A falta de conocer algo más sobre las mecánicas, OXENFREE destaca por un cuidado apartado artístico donde el punto de vista del jugador parece más el de un observador que el de un componente activo del grupo. Quizás sea la manera que tiene Night School de indicarnos que no sólo se trata de revivir ese paso de adolescencia a madurez, sino de tomar nuestra madurez actual (quien la tenga) para ayudar a Alex y sus amigos en su aventura.
De momento no hay mucha más información sobre OXENFREE. Ni plataformas ni fecha aproximada de salida, pero pueden apostar sus pulgares a que volverán a verle por aquí.Página Oficial