No hace falta irse muy lejos para ver el error que ha supuesto en todos los sentidos cualquier tecnología en 3D. No mucha gente se ha comprado una tele cara en medio de una crisis galopante, y si lo han hecho, ha sido un modelo barato. El 3D no es un motivo de compra, como si puede ser un cambio de resolución, o una mejora en la calidad de sonido.
En el mundo de los videojuegos no aporta nada, porque en el mejor de los casos tiene una penalización importante en el rendimiento, y nos fuerzan a llevar unas gafas dignas de cualquier polígono que se precie y además con batería… con la 3DS fue un gran fracaso, proponiendo las 3D como algo que perduraría, o que pudiera servir en algún juego, pero la realidad es que es un efecto anecdótico, y no necesario, que tampoco se ha explotado de ninguna manera… las 3D no venden.
Por si fuera poco, en el E3 no se ha dicho nada nuevo en este sentido. Entonces a uno se le queda la cara de tonto, con ese cierto gesto de que ya nos lo esperábamos. El 3D es un simple gadget, una marca, un valor añadido que no ha ofrecido nada nuevo, y que, por ejemplo en el cine, tampoco se ha explotado más allá de la fórmula de cobrar un par de euros más por ver una película con gafas, sin que aporte nada a su contenido. Lo interesante y lo que brilla por su ausencia es un uso inteligente de esta tecnología para que no se quede en un mero gadget y se convierta en algo totalmente necesario, un juego o una película que no pueda experimentarse correctamente si no es en 3D… pero por el momento creo que toda la inversión en publicidad, y desarrollos de fabricantes no ha servido de nada y no creo que nadie haga un mínimo esfuerzo por revivirlo.