En este video hay varias cosas que me preocupan. La primera es haber utilizado la temática de un videojuego de renombre para parodiar la muerte de Osama Bin Laden, especialmente sangrante que se trate de Super Mario. La segunda es la falta de empatía: qué pensaríamos como occidentales que somos si vieramos un juego en el que los cañones de Mario cayeran sobre nuestras casas y destrozaran toda nuestra forma de vida. O bien me hago mayor, o bien este sentido del humor Southparkiano deja de tener gracia si le damos más de una vuelta.