No soy demasiado amigo del reciclaje de títulos. Estos remakes tan de moda últimamente me suelen parecer la solución fácil que tienen las compañías para sacar unas perras sin apenas esfuerzo. Ahora bien, si hablamos de un clásico de hace dos generaciones de la categoría de Star Fox, la indignación inicial da paso al HAMOR y éste a la euforia. No hablamos de poner en HD lo que hace cuatro años era igual pero en baja resolución, hablamos de adaptar el cojonudérrimo título de Nintendo 64 a una portatil en 3D, no es lo mismo por mucho que se empeñen algunos.
A la pintaza tremenda que tiene el título hay que incluir todas esas macarradas que se añadirán en su paso a 3DS, cómo su visionado en 3D, el uso opcional del giroscopio y un multijugador que permitirá ver el careto de tus oponentes cuando sean aniquilados. A mi personalmente me vale.
