Balthazar’s Dream: Perra vida

Balthazar's Dream

Balthazar's Dream

Pocas cosas en la vida se merece menos el ser humano que los perros. Hablamos de la criatura que contiene todo lo bueno de la vida sin nada de lo malo, que consiguió incluso arrancarle al pelma de Lord Byron los versos más bonitos para el obituario de su mascota:

“Aquí reposan
los restos de una criatura
que fue bella sin vanidad
fuerte sin insolencia
valiente sin ferocidad
y tuvo todas las virtudes del hombre
y ninguno de sus defectos”

En serio, podría tirarme media vida hablando sobre esto, pero háganme caso. No nos los merecemos. Quizá tampoco a los gatos, pero al menos los gatos lo saben y actúan en consonancia. Los perros llevan demasiado tiempo intentando salvarnos de nuestra propia humanidad, y los pobres seguirán emperrados (¿han visto el juego de palabras?) en ello.

Balthazar’s Dream va de eso, de todo lo que puede llegar a hacer un perro por su amo. Desde Psilocybe Games, estudio formado por dos humanos y un can, nos proponen un plataformas en el que recorremos los mundos oníricos que quizá experimenten los mismos perros, donde Balthazar intenta seguir el olor de su dueño. Dustin está en coma y eso Balthazar no puede entenderlo, pero a la vez que detecta su olor en esos escenarios que visita mientras duerme al lado de la cama del hospital, puede oler una cosa siniestra que acecha. Y va a salvarle de ella.Aparte de la faceta más clásica de plataformas en 2D, Balthazar’s Dream incorpora un par de añadidos curiosos. Hay una barra de atención que se vacía al ver ardillas, juguetes… y si se queda a cero perderemos el control del perro. Igual que determinados objetos provocarán reacciones en él: un aspirador le hará huir o una pelota le obligará a perseguirla. Habrá que combinar el control con esos disparadores para avanzar por los sueños y salvar a Dustin.

Balthazar’s Dream ha pedido una cantidad ridícula en Kickstarter y parece que llegará sin problemas, y a la vez está en Greenlight batallando para hacerse un hueco en Steam. A mí ya con lo del perro me tenían desde el principio.Greenlight

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