Soy un completo desconocedor del autismo, sólo conozco la versión sesgada y algo evocadora que ha dado el cine de esta enfermedad, por lo que espero que mi señora vea esta entrada y, como buena pedagoga que es, me corrija si digo alguna gilipollez (lo cual hace estupendamente, por cierto).
Auto-Sim no es un juego. Lo puedes llamar simulación, herramienta de empatía, simulador sensorial… etc. Yo lo he llamado “experiencia desagradable”. El título fue desarrollado para el Hacking Health de Vancouver de este mismo año por unos diferentes creativos que vienen de disciplinas como la medicina, informática o diseño, y el objetivo era crear una herramienta para personas “neurotípicas” (lo he traducido tal cual y viene a decir “personas que no se encuentran en el espectro del autismo”), con el fin de que sean capaces de experimentar la sensación que podría sentir una persona autista en un parque.
Yo lo he probado durante un rato y os aseguro que es una experiencia completamente aterradora. No puedes interactuar con nada, el ruido resulta completamente abrasivo y la cercanía de otras personas distorsionan la realidad. Únicamente te sientes a salvo cuando te encuentras solo y lejos de cualquier actividad que se esté realizando dentro del parque.
Dicho todo lo anterior no se si me atrevo a recomendar la experiencia, aunque soy de los que creen que la única manera de entender a los demás es poniéndose en su pellejo, así que obviando cualquier consideración médica al respecto (ya dije que no tengo ni pajolera idea de esta enfermedad y no me atrevo a juzgar si esta simulación corresponde con la realidad) creo que puede ser interesante que le dediquéis unos minutos.
VÍA: Indie Statik