Buena parte no lo recordaréis, pero hubo un tiempo en que los juegos de deportes no estaban comandados exclusivamente por títulos presumiendo de licencias oficiales y banda sonora compuesta por estrellas del pop. El videojuego y su carrera técnica se lo termina llevando todo por delante, pero por suerte hay momentos de oasis evolucionista en el que las tornas se igualan y se producen pequeños fenómenos que logran expandir los límites de un género tan atado a las reglas del mundo real. Los juegos “de coches” me suelen aburrir sobremanera. Me da igual si se trata de complejísimos simuladores donde el realismo exponencial apenas deja hueco para cualquier tipo de mecánica interesante, o de esas otras sagas cuyo aparente único objetivo es sumar neones y carrocerías multicolores que se reflejen en charcos a 4k. Lonely Mountains: Downhill ya demostró hace unos meses que para alzarse con el título de “mejor simulador de bicicleta” no hacía falta hiper-realimos, sino entender que esto va de sensaciones. art of rally (así, en minúsculas) juega esas mismas cartas, y a juzgar por la opinión de quienes ya lo tienen en su poder, lleva una mano ganadora.
Funselektor es un one-man estudio afincado en Canadá tras cuyo nombre se esconde Dune Casu, un tipo que ya sorprendió a todos en 2015 con Absolute Drift, un título que ya presentaba algunos de los rasgos primordiales de art of rally. Para esta segunda incursión en el mundo de motor, Casu ha dado el salto a un simulador completo donde el minimalismo visual se une esta vez un sesudo interés por reproducir los patrones reales de comportamiento de algunos vehículos, aunque manteniendo siempre una línea muy clara orientada al disfrute de las sensaciones.
Lo primero que se puede decir de art of rally es que es BONITO, un adjetivo que no se utiliza tantas veces en un título de coches. Las líneas marcadas por su anterior título están ahí, cuya pasión por el derrape se mantiene intacta y a la que se han añadido una serie de parámetros para completar la experiencia. Una experiencia que se centra en los ralis clásicos, los de coches cuadrados y gente en medio de la carretera. Un título en el que importa tanto la velocidad a la que entras en una curva, como los árboles en flor que rodean el circuito.
art of rally se encuentra disponible en Windows desde el pasado 27 de septiembre.