Guía para ser un programador INDIE-HIPSTERConsejos útiles para convertirse en una referencia del sectorUn mundo indie-hipster
Es fundamental dotarlo de píxeles enormes, cuanto más grandes mejor y usa colores planos con una paleta simple pero efectista.
Homenaje a los clásicos. Si creciste con Tetris, mete sus piezas por todo el mundo y a ser posible úsalo como lenguaje para resolver determinados puzles.
Cielos azules. Rescata la era de los 8-16 bits y sus plataformas sin maldad con cielos claros y animalitos que pululan en libertad.
El anciano. Ese sabio del pueblo que nos dará las primeras indicaciones de que el mundo llega a su fin y somos la única esperanza de los confiados ciudadanos.
El héroe debe ser bonico
Si algo tienen los buenos plataformas es que deben tener un protagonista a la altura y que transmita MUCHA ternura.
Los accesorios. Para un indie-hipster es básico que el personaje tenga algún elemento diferencial. Lo mejor es que lleve en su enorme cabeza un FEZ rojo que combine a la perfección con su blanca piel.
Poderes especiales. En un mundo tan plano como el que vivimos lo mejor es que nuestro protagonista pueda rotar a su antojo la pantalla. Esto demuestra lo profundo de su ser y lo insustancial de la vida de los demás.
Usa las nuevas tecnologíasTodo hipster tiene en el móvil una extensión de sus manos. Para resolver algunos puzles será necesario que lean códigos QR con su teléfono último modelo. Si este posee una manzana en la parte posterior mucho mejor.
Utiliza gafas 3D. Los verdaderos hipsters saben apreciar esta interesante tecnología. Sólo si eres un verdadero hipser-gamer y completas la aventura al 100% serás merecedor de este novedoso modo de juego.
Fotografíate con objetos VintageVives en el siglo XXI por un error espacial. No te dejes llevar por las (otras) modas y posa con tus muñecos, mandos y demás memorabilia de cuando tus padres ni se conocían.
Deconstruye el color. Los niveles de tu juego no pueden ser siempre iguales. El uso de colores es demasiado cool. De pequeño recuerdas haberte dejado la vista jugando en la Game Boy. Inserta fases con ese color, o mejor aún con el rojizo de la Virtual Boy.
No aceptes críticas. Estas por encima del bien y del mal. Eres superior al resto de programadores. Mejor dicho, eres superior al resto de la raza humana. Si hay bugs en tu juego, es su problema que no saben encontrar la grandeza de ese pequeño easter egg que ha aparecido por obra del azar.
Engaña a los mediocres
Haz creer que FEZ es un juego de plataformas, donde recolectas cubos. Sus simples mentes creerán que es algo plano, insustancial, de fácil resolución.
Cambia por completo a mitad de la aventura. Cuando los simples sigan dando saltos y rotando el mundo, tu ya habrás cambiado por completo el sentido de su existencia. Estás metido de lleno en un juego cerebral, donde habrá que pensar, razonar y tener la vista en primera persona preparada para todo.
Resuelve usando el intelecto. Y todos los medios digitales a tu servicio. Nadie te proporcionará ayuda, estás sólo ante un gigante reloj que girará según pase el tiempo, ya sean segundos, horas, días o semanas.
ConclusiónNunca serás lo bastante hipster como para enfrentarte a Phil Fish y lo sabes.
Para acercarte a su grandeza deberás jugar a FEZ y sentir en tus propias manos lo que es una creación que el mismísimo Dios ha querido darnos a los mortales.
No es un videojuego, es una experiencia mística que juega con tu realidad haciendo tambalear los mismos cimientos, no sólo de la industria del entretenimiento, sino de la naturaleza humana.
CONCLUSIÓN REAL
(Sin ironía)
Me parecía imposible apartar el análisis de FEZ de la imagen de su creador Phil Fish.
Dejando de lado razones personales (que me llevan a pensar que es una persona desagradable y con demasiados aires de grandeza) el juego que ha creado, es una pequeña joya.
Ha sabido crear un mundo que entra por los ojos desde el primer momento y que teniendo a un protagonista simpaticote como aliado, es un golpe en la cara a la simpleza que parece transmitir en todo momento.
FEZ son dos juegos completamente distintos. Al principio un plataformas sencillo en el que con la excusa de girar el mundo seremos capaces de avanzar y obtener objetos. De repente todo cambia, de hecho el propio juego se resetea (gran detalle) y nos encontramos con la pausa absoluta magníficamente representada en el nivel con el reloj gigante.
A pesar de estas bondades muy bien planificadas no me parece el juego redondo que nos llevaban vendiendo durante años. A esos errores de programación mencionados, la poca fiabilidad de la palabras de su creador y otros detalles que enojan al comprador, el gran problema de FEZ es su estructura final. Todo parece dejado al azar ya que habrá ciertos puzles que sólo podremos completar mirando guías. Eso me parece inadmisible e imperdonable.
Sus pecados sobresalen sobre sus bondades
Por ello creía necesario enfocarlo desde la perspectiva de su creador como gran figura (y con humor), tanto para lo bueno como para lo malo. Quizás teniendo los pies en la tierra, no creando y entrando a cada pelea y centrándose en su obra hubiésemos disfrutado de algo completamente genial y no en pura fachada de un crio con aires de grandeza.
