¿Qué me dicen de la alegría de estar viendo un título que te atrae y descubrir que se está realizando dentro de nuestras fronteras? The Time I Have Left es el primer proyecto de GROUND Game Atelier, un estudio afincado en Barcelona comandado por Yite y Elías que junto a Javier Caravaca y Flama Studio, nos proponen una suerte de distopía subterránea donde el tiempo tiene un papel principal.
En la aparente soledad de la gigantesca ciudad subterránea de la Colonia 7, Aline sufre el súbito espasmo que marca la fase final de la miasma: en tan solo seis horas, su vida llegará a su fin.
Con esta escueta sinopsis, The Time I Have Left nos traslada a un ¿futuro? que mezcla ruina y alta tecnología, donde encarnaremos a Aline, una joven completamente aislada que tendrá que recorrer Colonia 7 mientras descubre los secretos que allí se esconden con el único objetivo de sobrevivir un minuto más.
The Time I Have Left ofrece un mundo en azules y rojos que parece cambiar a blanco y negro cuando nuestra protagonista se enfrenta a sus miedos. Resulta difícil deducir exactamente el gameplay a través del tráiler, pero parece que nos encontramos ante un título de exploración en la que cada run nos dará la oportunidad de descubrir un nuevo secreto o atajo con el que poder sobrevivir un poquito más en nuestra siguiente partida. A esto hay que sumar los miedos de Aline, a los cuales nos enfrentaremos en combates por turnos con un toque dinámico.
Me gusta tanto lo que se como lo que se intuye de The Time I Have Left. Su propuesta estética, con esas sombras durísimas sobre su iluminación en rojo y azul junto con algunos momentos en blanco y negro que retrotraen al imaginario impresionista, le dan una personalidad que es francamente de agradecer. Toca esperar para poder comprobar el juego que puede dar el tiempo en las diferentes runs y cómo se integra esta supuesta sensación de prisa con los combates por turnos.
The Time I Have Left no tiene fecha de salida más allá de un lacónico “late 2023”, así que intuyo que todavía le queda mucho camino por recorrer. Estaremos atentos.