Siempre he pensado que los survival horror clásicos tenían mucho más de horror que de survival, especialmente en los últimos tiempos en que todos tienden hacia la acción más descarada. Sin embargo, como de costumbre, los indies vienen al rescate y parece que la nueva tendencia es la supervivencia en mundos abiertos. Si hace no mucho teníamos Miasmata y esta misma semana herr Doktor nos traía el prometedor Darkwood, ayer nos encontrábamos en Greenlight con uno de esos proyectos que te hacen dudar de que lo visto sea real por la desmesuradamente buena pinta que tienen.
The Forest, desarrollado por los primerizos (creo) SKS Games, combina un inicio que recuerda mucho a Lost o Náufrago (por suerte sólo el inicio…) con la cada vez más común mecánica de supervivencia construyéndonos un refugio o buscando madera para hacer una hoguera. ¿Aburrido? quizás, pero sólo hasta que todo se tuerce, claro, y se convierte en una suerte de Slender macabro. Lo cierto es que visto lo visto si algún día me quedo atrapado en una isla desierta antes me iré nadando mar adentro que meterme en el bosque o en una cueva de la que lo menos malo que puede salir son toneladas de excrementos de murciélago.
Lo sorprendente del proyecto, a parte de lo sólidas que parecen sus mecánicas o su ambientación, es su excepcional calidad gráfica, máxime tratándose de una versión pre-alfa y de un juego indie, con lo que no sé hasta qué punto lo que vemos en el trailer se parece a la versión final. En cualquier caso por votarlo en Greenlight no pasa nada ¿no?