Hay algo mucho peor que tener un hijo cani, una madre en Mujeres, Hombres y Viceversa o un padre como contertulio en Punto Pelota. Exacto, me refiero al desarrollador de remakes. Cuidado aquí porque este personaje caminando por el lado oscuro puede hacer más daño que Miguel Ángel Rodriguez (a.k.a. MAR) al volante. Pregúntense lo siguiente: ¿serían capaces de querer a un familiar/amigo/pareja/mascota sabiendo que ha participado en el desarrollo del nuevo Flashback? Yo desde luego no. Ojo, no porque el resultado final del título sea bueno o malo, que eso ME DA IGUAL, sino porque hay que tener el corazón muy negro para haber participado en algo que está escupiendo a la cara de un clásico, y por ende, a los recuerdos de toda una generación de jugadores. Moraleja: Mucho cuidado con el tema remake.
Strider llegó al mundo en el año 1989 de la mano de Capcom. Personalmente no lo considero uno de los grandes, aunque también puede ser porque llegué algo tarde a él y alguna de sus características que intuyo novedosas, ya estaban implementadas en títulos posteriores. En cualquier caso se trata de un título notable que destacó por su alto ritmo, un carismático protagonista y un buen equilibrio entre plataformas y arcade.
Ahora nos llega un nuevo Strider que -agárrense donde puedan- RESPETA EL ESPÍRITU DEL ORIGINAL. Les he dejado picuetos, pero esto está pasando. No lo han convertido a 3D ni han vestido al protagonista con un ridículo traje de moda. Mejoras en los gráficos, mecánicas originales elevadas a mayor exponente y YA. Así si, joder, así si.
A mi me vale, y si a ustedes también pues ya sólo me queda decirles que saldrá a principios de 2014 para Xbox 360, Xbox One, PS3, PS4 y PC.