Hay muchas barreras que pueden oponerse entre el amor de una pareja: la distancia, la rutina, los suegros… o un agujero en el suelo lleno de pinchos afilados. Sobre esto último versa ‘One and One Story‘ y creedme si os digo que estamos ante uno de los títulos más jodidamente encantadores que me he echado a la cara en varios meses.
El objetivo que nos propone el título es tan sencillo como juntar a un niño y una niña que están separados en los extremos opuestos de cada nivel. Al empezar se nos ofrecerán unas reglas básicas, que irán cambiando en función de la narración, esto hará que podamos controlar a uno sólo de los personajes, a los dos o que se inviertan controles… etc. Los puzles no son especialmente complicados, pero la mínima narración genera la fuerza y la emotividad necesaria para que su resolución resulte enormemente placentera.
Nos encontramos pues ante un título que podemos terminar en media hora, pero la conjunción de puzles, narración y una magnífica BSO (que podéis escuchar aquí) hacen que la experiencia perdure durante varias horas. No es de extrañar que forme parte de los finalistas en la sección de estudiantes del IGF. Imprescindible.
