COLABORA EN NUESTRO PATREON

Jalopy: Cruzando el Telón de Acero

Jalopy
Jalopy

Jalopy viene a significar algo así como «cacharro» en nuestro idioma, o «fotingo» (maravillosa palabra) si son ustedes canarios como yo. Vamos, una puta carraca de cuatro ruedas y un par de cachos de metal que se sostiene sólo para poder escupirle en la cara a Dios y promulgar nuestro desafío en un perfecto ruso. Porque hablamos del Laika 601, una maravilla de la ingeniería soviética que puede que no sea bonito, puede que se rompa y que dé puro asco mirarlo incluso de soslayo, pero cumple que su función perfectamente: ayudarnos a abandonar un Bloque del Este que está derrumbándose.

Primo hermano de los juegos de camiones, autobuses y demás que tienen a medio Steam enganchado y que yo procuro evitar por eso de no querer acabar con un palillo en la boca y el brazo por la ventana de casa mientras «conduzco», Jalopy le da una vuelta muy interesante al género. Nuestra misión será enfrentarnos a un entorno procedural que emula los paisajes ruinosos del fin del comunismo y adentrarnos en el maravilloso capitalismo a lomos de nuestro flamante Laika 601.Proyecto unipersonal de Greg Pryjmachuk (Formula 1), entre las cositas que nos va a permitir hacer nuestra bella cacharra está la posibilidad de pasar contrabando por las fronteras, vender piezas para adentrarnos en el floreciente capitalismo… y reparar nuestro bólido para seguir rodando con él un día más.

Admítanlo: todo lo que lleve comunismo mola más, y que el Laika 601 esté basado en el mítico Trabbie de la República Democrática Alemana le da un extra a esto. Condúzcanlo con cariño.Greenlight