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Cultist Simulator: Ocultismo espontáneo

Cultist Simulator

Hace poco más de un año que el británico Alexis Kennedy dejaba Failbetter Games. Miembro fundador de la compañía, creador de Fallen London y director creativo de Sunless Sea, dejaba el poderosísimo estudio que había ayudado a montar y decidía irse a «caminar por el mundo como Caine en Kung Fu«. Vamos, que pasaba a trabajar como freelance y ofrecer sus servicios. Creo que pueden imaginarse el caramelito en el que se convirtió para muchas desarrolladoras, que ya le han contratado para unas cuantas cosas, entre ellas este jueguillo, el guión de uno de los DLCs de Stellaris o un papel como escritor en el próximo Dragon Age.

Y sin embargo, entiendo que uno acaba echando de menos la posibilidad de trabajar en algo totalmente suyo, un proyecto propio que sea hijo de sus inquietudes. Eso es Cultist Simulator, después de varios papeles trabajando para otros, la vuelta del creador a un videojuego propio. De nuevo un título de carácter narrativo en el que encarnamos a un ocultista en los años 20 del siglo pasado. Un fan de lo sobrenatural que tiene como objetivo convertirse en otra cosa a través de la iluminación, o quizá arrasar el mundo que le ha negado vaya a saber usted el qué.Como pueden ver en el vídeo, a Cultist Simulator se juega casi como a un juego de cartas. Hay una serie de tarjetas con personajes, elementos y condiciones, y nuestro papel es irlas mezclando, combinando distintas cartas (miembros del culto, motivos, objetos…) para crear nuevas posibilidades y acciones con las que luchar por la iluminación. Como dice en la propia página de su proyecto en Kickstarter, tiene el mismo carácter experimental que Fallen London pero sin las mecánicas de grinding de los videojuegos F2P.

Me interesa ver especialmente la mecánica de las cartas, porque tanta combinación da para muchas opciones (una forma de salvar la monotonía final de algo simular como The Shrouded Isle). Y miren, no habrá problema para probarla, porque ya en tres días el proyecto ha sobrepasado con holgura la cantidad que necesitaba. Ahora queda esperar.Página Oficial