Pues eso, que THQ ha terminado de implosionar. Cuando muere una distribuidora que últimamente traía cosas muy bonicas, muere algo de HAMOR en el mundo. Ayer se conocía que ya ha pasado por el equivalente de EEUU de un concurso de acreedores y que ha ido sacado sus activos a subasta.
En este caso, los activos son sus estudios y propiedades intelectuales, en torno a los cuales se ha reunido una masa de buitres hambrienta de jueguicos.
– Sega ha comprado (¿tiene dinero esta gente?) a Relic y las marcas de Dawn of War y Company of Heroes.
– Take-Two se lleva al estudio Turtle Rock, que planeaba un súter cooperativo llamado Evolve.
– Crytek se ha hecho con la licencia de Homefront (estaba desarrollando ya la segunda parte)
– Ubisoft ha comprado los derechos de South Park: The Stick of Truth NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO y de paso compran THQ Montreal. De todas formas hay pelea con esto, porque los creadores de South Park sostienen que los derechos de la marca son suyos y sólo los habían cedido a THQ, no vendido.
– Vigil Games no ha sido adquirida aún, por lo que no sabremos lo que pasará con Darksiders (aunque Platinum Games se ha pronunciado sobre el tema)
– Koch Media se queda con Volition (Red Faction, Saints Row) y los derechos de la saga Metro.
No pinta nada bien esto, y muchos de los ex-empleados se están despidiendo en Twitter. Tiene pinta de que mucha gente perderá su trabajo, y no las tengo todas conmigo con que algunos de los juegos que se esperaban acaben por salir.