Los videojuegos de terror tuvieron su momento de gloria con nuestra querida PSX cuando se escudriñó el término “Survival Horror“. Resident Evil encabezaba una nueva hornada de títulos que necesitaban ser jugados de noche, con la luz apagada, con temblores en las manos y la constante sensación de palpitaciones en el pecho. Los años pasaron y esa moda quedó relegada ante nuevas ideas que basaron más su jugabilidad en la acción, dejando de lado la psique humana.
Para todos aquellos nostálgicos de sensaciones angustiosas la aparición de un nuevo juego de terror es una alegría, por eso cuando por fin llegó a las tiendas LUCIUS no pude más que hacerme con una copia. Desarrollado por Shiver Games, un estudio Finlandés y distribuido en España por la siempre fantástica FX Interactive esta nueva aventura de horror controlamos a un niño de esos que da cosica.
Nosotros somos Lucius, un joven moreno de mirada perdida que vive en una enorme mansión rodeado de sirvientes y familiares de todo tipo. La realidad es otra, nuestro verdadero padre no es otro que Lucifer que una noche decide visitarnos y contarnos la verdad sobre nuestro origen y destino. Somos un ser capaz de dominar determinados poderes que sólo persiguen hacer el mal.
Las personas que nos rodean no tienen la menor idea de que se esconde dentro de este niño y para su desgracia en la casa empiezan a suceder extrañas muertes, en un primer momento parecían fruto del propio azar, hasta que se demuestra que son asesinatos. Entonces aparece la figura del detective McGuffin quien se encargará de investigar la razón de tantas muertes repentinas. Este personaje hará de narrador en determinados momentos de la historia.
El juego no deja de ser una aventura en tercera persona con mucho de point and click. Nos moveremos con total libertad por la mansión en donde deberemos recorrer cada rincón en busca de objetos con los que desatar nuestra maldad. Los primeros pasos son de lo más sencillos ya que los puzles a resolver están delante de nuestras narices, pero la cosa se irá complicando con el paso del tiempo y el cerco cada vez mayor sobre esta joven criatura del señor demonio.
No sólo de maldades vive el hijo de Lucifer, también de manera opcional podremos realizar tareas bondadosas, como sacar la basura o recoger un objeto para un personaje. Estas acciones nos concederán premios que son mas decorativos que otra cosa, pero añaden cierta variedad a una jugabilidad, por otro lado, de lo más repetitiva.
Lucius acaba siendo una interesante mezcla entre aventura gráfica donde hacer uso de objetos, combinarlos, etc. point and Click ya que deberemos tocar prácticamente todo y juego de inteligencia, ya que muchas veces deberemos usar todo nuestro sentido común para encontrar la manera de matar al jardinero o a la asistenta. Algo que me sorprendió fue la inclusión de desnudos integrales de algunos personajes, cosa poco habitual y que suele ser suavizada.
El joven muchacho cuenta con la ayuda de una serie de poderes que conforme avanzamos se harán más poderosos y necesarios. Quizás el más interesante sea la telequinesis que nos ayudará a conseguir objetos lejanos. O el control mental que hará que nuestros semejantes realicen acciones sin darse cuenta de lo que sucede.
Un detalle que me parece a destacar dentro de la trama es la figura del padre un senador llamado Charles que siempre está ocupado y que en breve se enfrenta a una elección. La campaña política es su prioridad y todos estos asesinatos no son más que una piedra en su camino, negándose a abandonar la casa a pesar de los constantes asesinatos.
Es interesante destacar este detalle, ya que cada vez que hablamos con este padre nos mandará lejos, no dando la menor importancia a su hijo y mostrando esa actitud miles de veces mostrada en Hollywood del niño abandonado por el padre ocupado en su trabajo. Puede que todos los problemas de Lucius vengan inducidos por el maltrato que le ha producido su padre, esa falta de atención que se acaba convirtiendo en locura y muerte. Es sólo una hipótesis, que me gusta más que la resuelta en el juego.
En cuanto al juego en sí no querría dejar atrás los detalles que traban en muchas ocasiones la fluidez que normalmente posee el título. Como se puede apreciar en las imágenes que acompañan el análisis, no estamos ante un portento gráfico en cambio se muestra muy exigente con la tarjeta gráfica y sufre de numerosos bajones de frames, sobre todo cuando muestra algún efecto como en el caso del fuego. La optimización brilla por su ausencia.
Por otro lado, entre lo positivo encontramos el fantástico trabajo de FX en materia de localización. La versión que se distribuye a través de Steam posee subtítulos en nuestro idioma, pero estos chicos se han encargado de doblarlo al castellano de manera muy correcta, siendo especialmente buena la voz de Lucifer que según los títulos de crédito corresponde a Luis Bajo.
En conclusión es un juego muy interesante si deseáis pasar un poquito de miedo, sobre todo por el personaje principal que recuerda mucho a niños de películas clásicas de terror, sin embargo se ve lastrado por ser demasiado repetitivo, hasta el punto de llegar a pensar que pinta tanta gente asesinable en una casa.