Galaxy of Pen & Paper
CríticaEl foco se sitúa sobre una mesa en medio de una (enorme) habitación llena de referencias ochentonoventeras. La infancia y la adolescencia del público potencial está ahí, gritándole que vuelva a ese momento en el que se sentaba con sus amigos a comer cotufas, arrojar poliedros imposibles y coleccionar cicatrices en su hoja de personaje. Creamos al que será el director de juego (nunca me gustó el término dungeon master) de entre un montón posible de modelos y ropajes y nos preparamos para algo verdaderamente importante: venimos a jugar a rol.
Ya nos había llegado un videojuego desde Brasil partiendo de esa premisa, Knights of Pen & Paper, y aunque lo lógico habría sido continuar con ese mundo de fantasía, en Behold Studios optaron por volcarse en la ciencia ficción. Se trajeron bajo el brazo unas cuantas novedades para hacer que fuera un título propio y no una mera continuación, pero está claro que el espíritu y las bases de su predecesor están ahí, funcionando como una máquina bien engrasada. Así que hecho el director creamos a nuestros dos primeros jugadores, elegimos una de las tres razas posibles (humanos, aliens verdes listos o simios fuertotes) y nos lanzamos a la aventura.La mecánica de Galaxy of Pen & Paper es muy sencilla: tomamos a ratos el papel del master y a ratos el de los jugadores (combates y algunas decisiones), tratando de crear la mejor partida posible entre todos. Para ello podemos seguir la trama principal del juego creando misiones del modo historia, pero también a medida que avancemos, hablemos con secundarios y exploremos, podremos adquirir tipos distintos de misiones secundarias para ir cebando de experiencia a los jugadores o simplemente echar un rato sin las prisas de la misión principal. Mención especial merecen los packs de misiones que podemos “comprar” con la paga de nuestro master, que desbloquean nuevas clases de personaje, como cuando uno quemaba su dinero en suplementos para mejorar su rolazo.Creada la misión, sea de lo que sea, muy probablemente nos tocará hacer una de dos cosas: o avanzar por el mapa de cada planeta que visitemos (buscando recursos, rastreando mineral, yendo de compras…) o darnos de hostias con un grupo de enemigos que colocará el director de juego. Aquí, como en el juego anterior, se compensa la osadía y cuantos más enemigos, más experiencia ganaremos.“Behold Studios ya demostraron con Chroma Squad que saben manejarse muy bien en esas arenas tan movedizas del humor”Siendo una parte importantísima del juego (la mayor parte de las horas dedicadas serán a luchar), los combates son lo suficientemente entretenidos como para no cansar. A veces la curva de dificultad nos penalizará no haber hecho alguna misión más, pero nada que no se pueda arreglar jugando a crear el mejor grupo de personajes posible y aprovechando las fortalezas de cada cual. Iremos desbloqueando habilidades, buscando combinaciones y ejerciendo alquimia rolera para convertirnos en una horda imbatible. Igualito que una partida de rol en mesa especialmente munchkin.Despachado el tema del combate, vamos a lo importante, que son unas cuantas cosas.
¿Emula con fidelidad Galaxy of Pen & Paper una sesión de rol? Pues me alegro de que me hagan esa pregunta, amigos. No es fácil de responder porque cada cual tiende a comparar con su propio grupo de juego, además de que aquí hay una trama dentro de la partida, pero también una serie de interacciones y sucesos fuera de la partida. Lo que sí tengo claro es que no hay otro videojuego (salvo su juego padre) que se acerque tanto a la experiencia en sí misma. Aquí además se trata de una partida a través de Internet, detalle simpático que acaba cobrando importancia a medida que jugamos y con el que hilan un par de temas.
Démosle una vuelta al asunto: está claro que nunca va a poder simularse (y menos en un título para un jugador) una partida de rol con absoluta fidelidad, pero lo que se hace aquí sí divertirá al jugador que no haya catado ese mundo.“Todo en Galaxy of Pen & Paper trabaja para sumergir al jugador en la época en la que se desarrolla, sin por ello fiarlo todo a la nostalgia ni caer en la autocomplacencia”Luego está el tema del humor.
Qué difícil es hacer humor bien en general, y en los videojuegos en particular. La ensalada de guiños, las autorreferencias, el guiñarle continuamente el ojo al jugador para que pille lo ocurrente que eres… Hay una lista enorme de errores en los que puede caerse que acaban arruinando la experiencia a base de forzarla. Y especial miedo da cuando ya entramos en la década de los ochenta (y ahora los noventa), lugar común cada vez más manoseado por la pereza de sacar tres figuritas y dos series y creer que ya está todo hecho.Behold Studios ya demostraron con Chroma Squad que saben manejarse muy bien en esas arenas tan movedizas, y me alegra decirles que aquí lo han conseguido también. En alguna que otra ocasión se nota que se han gustado un poco a sí mismos, pero por lo general el nivel de homenajes y guiños es el justo para no empachar y tampoco hay un abuso de la jerga rolera ni de la memorabilia noventera. Hay mucho tropo (alguno subvertido a la risa), giros simpáticos y chorradas varias, pero siempre desde el respeto al pequeño mundo que han creado para el juego. Para mí éste es, probablemente, el mayor acierto de todo el juego.Como añadido final está el combate entre naves espaciales. Lo han resuelto de manera muy simpática añadiendo el factor azar con un dado (que podremos ir mejorando) que nos permite una serie de ataques, y se hace tan ligero como divertido.El resultado global es más que satisfactorio. Todo en Galaxy of Pen & Paper trabaja para sumergir al jugador en la época en la que se desarrolla (esa musiquita y ese pixel art…), pero a la vez, no lo fía todo a la nostalgia ni caer en la autocomplacencia. Demuestra que un grupo de personas con una idea muy clara de lo que quiere hacer y controlando los propios excesos en los que cae uno cuando quiere ser gracioso puede desarrollar un videojuego al que ponerle muy pocas pegas. ¿Exceso de combates, tal vez? Sólo si al jugador no le gustan o si no tenía claro (y el juego lo deja bien claro) que aquí son materia troncal.
Galaxy of Pen & Paper acaba siendo disfrutable, entretenido y gracioso. Su trama principal, para el tipo de juego que es, termina siendo mejor de lo esperada y los enfrentamientos son divertidos. Y sobre todo, no abusa con el rolerismo: estoy seguro de que a quien no haya jugado pero disfrute de títulos de rol en videojuegos también le gustará. No les cambiará la vida pero les hará reír, que falta nos hace todos.