Hace unos días le leí no recuerdo a quién (y miren que he estado rebuscando) una estadística sobre los videojuegos presentados en este último E3 y la relación del jugador con el entorno. Seguía habiendo un porcentaje abrumador, que rondaba el 90%, en el que lo que hacíamos dentro del juego era disparar, tratar con el otro a través de ráfagas y tiros. Venimos de donde venimos y ya hemos andado bastante camino, pero parece que nos cuesta muchísimo salir de ese molde y que quien gasta mucho dinero en grandes producciones tiene claro que ése ha de ser su camino. No se preocupen por eso, que aquí venimos a hablar de otras cosas, como este Adrian.
Primer videojuego de un creador que se hace llamar barta, Adrian recibe su nombre de un tipo de casco que llevaban los soldados franceses en las trincheras enormes de la Primera Guerra Mundial. Un conflicto que ya hemos visto desde distintas ópticas, incluyendo un inspirado Valiant Hearts, pero que tiene más chicha de la que hemos podido sacar. Por eso quiere centrarse en una de las partes menos visitadas: la vida en la trinchera y cómo pasaba el tiempo bajo tierra, entre bombardeo y bombardeo y sin saber cuándo uno volvería a ver la luz del sol.
En Adrian no vamos a pegar un solo tiro (parece) porque estaremos ocupados recurriendo las trincheras e interactuando con el resto de soldados, empapándonos de la tragedia y la desesperación, viviendo en el drama real de la guerra. Dicho para que se me entienda, estamos ante un walking simulator (término que creo que deberíamos reapropiarnos a pesar de haber nacido con ánimo despectivo), un acercamiento distinto a la Gran Guerra reduciendo la escala macro a la humana.
Si les pica la curiosidad, sepan que ya mismo lo tienen disponible para PC al precio que quieran en itch.io.Página OficialFuente: Indiegames.com