En realidad la cosa no va de Wikileaks sino de Snowden y el lío que se montó con la filtración de documentos de alto secreto a la prensa, pero ¿quién podría no aprovechar esta ocasión para soltar la inmortal frase de Ignatius? Yo desde luego no. En fin, como les decía estamos ante otro de esos títulos que recoge la actualidad para convertirla en entretenimiento, y bendita sea esta tendencia oiga. En este caso se trata de un título de corte experimental que pretende introducirnos de lleno en el paranoico universo de la Agencia Nacional de Seguridad estadounidense.
Antiguamente imaginábamos a los agentes secretos vestidos de etiqueta y tomando «vodka martini, agitado, no revuelto» mientras destapaban complejas tramas criminales organizadas por cerebros del mal. Ignoro si alguna vez fue así, pero en la actualidad los tipos que manejan el cotarro llevan gafas y tienen doctorados en el MIT. En Top Secret encarnamos a un nuevo recluta de la NSA encargado de averiguar quién ha filtrado unos documentos ultra-secretos a la prensa. Para ello nada de complicados gadgets ni luchas contra amazonas con trajes plateados que podrían partirte el cuello con las piernas. Teléfono, nombre y correo electrónico es lo único que nos hace falta para vigilar un objetivo.
Desarrollado por James Long, Top Secret se arriesga con un título que lo deja todo en manos de la narrativa, apostando por un elemento tan cotidiano como el correo electrónico para la interfaz. En él exploraremos las complejas cuestiones planteadas a raíz de las filtraciones de Snowden mientras se mezcla realidad y ficción, ya que trabajaremos con parte de los mensajes reales filtrados en su momento.
Toda la narración se desarrolla en tiempo real durante varios días, por lo que cualquier reacción tardía puede significar perder a un confidente o que este deje de confiar en nosotros. En cualquier caso no deja de ser una suerte de «elige tu propia aventura» aprovechando un evento real de magnitud con el añadido de golpear un poquito la cuarta pared, así que para ponerle más sal al asunto contamos con la posibilidad de «jugar» con el cifrado de los mensajes de la misma manera que lo hizo el propio Snowden para esconderse de la NSA.
Top Secret se encuentra a una semana de finalizar su Kickstarter y aún no ha conseguido el objetivo. Para animar en la financiación, Long ha puesto a disposición de todo el mundo una demo que simula lo que será el resultado final. Desde aquí toda la suerte del mundo.Top Secret Kickstarter
